Los analistas e inversores se han puesto bastante nerviosos tras conocer la decisión de Donald Trump de imponer aranceles de importación del 10% sobre los smartphones y ordenadores portátiles entre los que se incluyen los iPhone y los Mac.
Tim Cook consiguió retrasar esta imposición durante varios meses gracias a una conversación que tuvo con el presidente de EEUU. Pero Donald Trump ha roto esta promesa y ha cambiado de opinión imponiendo este impuesto del 10%, aunque Trump «se preocupó» por la reacción de los consumidores afirmando que este incremento del 10% en los precios finales puede ser asumido perfectamente por los consumidores.
Los inversores se ponen nerviosos con los aranceles de Trump
A los pocos minutos de que el Presidente afirmara esto en The Wall Street Journal las acciones de Apple caían más de un 2%, por lo que los inversores no se han tomado esta amenaza a la ligera.
Según los analistas esta noticia se sumará a las malas noticias que ha recibido la compañía en estas últimas semanas, como la baja demanda de inicial del iPhone XS y XR. Está claro que esta decisión aun está en una negociación más amplia con China y el anuncio es simplemente para poder avivar aun más estas negociaciones pero deberemos de esperar a ver si se termina materializando.
Si Donald Trump al final impone esta política de aranceles los analistas ya exploran cómo afectará al precio de los iPhone y Mac en los próximo 6-12 meses y a la demanda de los mismos. Está claro que Apple deberá de absorber algo de este arancel para evitar que lo pague todo el consumidor, porque si no el precio de los iPhone llegará a un máximo bastante preocupante.
Como de decía anteriormente Trump quiere conseguir que Apple fabrique en suelo americano, pero según Wedbush la compañía tiene una cadena de producción muy compleja en China por lo que será casi imposible ver a priori una fábrica de iPhone en EEUU.