Apple, Tesla y viceversa. El «robo» continuo de trabajadores
Apple y Tesla son dos de las empresas más punteras que existen de sus sectores en el mundo. Tanto una empresa como otra quieren al mejor personal, algo que podemos ver en el continuo «robo» de trabajadores.
Aunque a priori pueda parecer que los californianos dirigidos por Tim Cook estarían contratando a personal para el proyecto «TITAN», lo cierto es que las ofertas de trabajo están enfocadas a seguridad informática, puestos de cadenas de suministros o producción.
El caso más llamativo de trabajadores que han ido rotando de una empresa a otra fue el de Doug Field, vicepresidente de ingeniera de Apple hasta el 2013. Doug decidió unirse a la compañía de Elon Musk, hasta que hace unos meses decidió tomarse una excelencia, donde finalmente regresó a la que fue su casa durante varios años.
Trabajar en Apple beneficia la contratación en Tesla
Bloomberg publicó hace unos años que: «Tesla ha contratado más trabajadores procedentes de Apple que de cualquier otro lugar». Elon Musk tiene cierta debilidad por los trabajadores de Cupertino, donde se llegó a decir que trabajar en Apple prácticamente aseguraba una puerta abierta en Tesla. Pero últimamente son más los trabajadores que desean irse a trabajar a Apple (o regresar). En lo que llevamos de año, al menos 46 trabajadores de Tesla han abandonado la compañía para incorporarse a las órdenes de Tim Cook.
Elon Musk afirma en un comunicado que Tesla tiene un camino muy complicado en en su sector, además de contar con menos dinero de que lo puede contar Apple, donde desea todo lo mejor para sus ex-trabajadores. Según la CNBC (y recogido por ED), que han podido hablar con algunos empleados de Tesla, «La moral se ha desplomado entre los ingenieros y técnicos de las fábricas de la compañía y de las oficinas centrales en Palo Alto cuando se hizo oficial la salida de Doug Field».
El CEO de la compañía de vehículos eléctricos ha bajado considerablemente su reputación por culpa de ciertos comportamientos en las redes sociales, afectando incluso económicamente a la propia compañía. Elon admite que trabajar en Tesla es el camino difícil en comparación con otras compañías, donde las adversidades a las que se enfrentan, son mayores.