El Apple Watch comenzó a ser una realidad a partir de 2013 y el jefe de operaciones de la compañía, Jeff Williams, ha sido el principal responsable de su desarrollo. Ahora este ejecutivo ha dado una interesante entrevista al medio Bloomberg donde ha desvelado detalles del desarrollo del reloj inteligente de la compañía que nos han llamado mucho la atención y que te comentamos a continuación.
Dinero para aburrir entre los compradores de Apple Watch
Todos sabemos que el Apple Watch ha tenido en varias de sus ediciones un modelo construido en oro de 18 quilates, aunque dejó de fabricarse en el año 2016 tras 16 meses en el mercado. Todos pensábamos que este era un modelo inaccesible y que obviamente no tendría ninguna venta pero el jefe de operaciones de Apple nos ha develado que la compañía vendió decenas de miles de unidades en las dos primeras semanas de vida del reloj en el mercado, llegando a agotarse.
Se nota que en el mundo tecnológico y en el de la moda unido hay bastante dinero porque gastar 10.000 dólares en un reloj inteligente bañado en oro obviamente es algo que no está en la mente de muchas personas que quieren llegar a final de mes.
Otra de las anécdotas que ha contado Jeff William está centrada en los primeros prototipos del Apple Watch que dieron muchos problemas. Antes del lanzamiento del reloj inteligente de Apple en 2015 los empleados tuvieron la oportunidad de probar los primeros prototipos que salieron de la cadena de producción pero comenzaron a dar severos problemas.
Estos problemas no estaban en el uso del dispositivo si no en la reacción alérgica que daba a los empleados que lo llevaban puesto. Esto provocó que tuvieran que parar toda la producción y eliminar las unidades producidas para poder cambiar el níquel utilizado en el chasis ya que provocaba reacciones alérgicas severas y que podría suponer un grave problema si llega a salir al mercado de esa manera. Tras detectarlo las nuevas unidades comenzaron a producirse con un níquel diferente que no daba esta reacción alérgica.
Es verdad que el níquel es un metal delicado y que la normativa europea restringe a unas cantidades muy concretas en los dispositivos electrónicos. El directivo de Apple se defiende de la siguiente manera:
Los modelos Apple Watch con una caja de acero inoxidable o de aluminio, las partes de acero inoxidable de algunas bandas de Apple Watch , las partes metálicas de las bandas de Hermès y los imanes en el reloj y las bandas, contienen un poco de níquel. Sin embargo, todos caen por debajo de las estrictas restricciones de níquel establecidas por la normativa europea REACH. Por lo tanto, aunque es poco probable que la exposición al níquel sea un problema, debe tener en cuenta la posibilidad en caso de que sea susceptible a reacciones relacionadas con el níquel.
Déjanos en la caja de comentarios qué opinas de esta entrevista, ¿habrías comprado este Apple Watch de 10.000 dólares?