Las últimas decisiones del gobierno de Donald Trump en Estados Unidos está afectando gravemente a la economía turca, respondiendo con un boicot hacia los productos de Apple, empezando por el iPhone.
El problema comenzó la semana pasada, donde Estados Unidos agravó los aranceles del aluminio y del acero, además de imponer dos sanciones, afectando considerablemente a la moneda del propio país. Como respuesta inmediata, la máxima autoridad del país animó a sus ciudadanos a dejar de utilizar los dispositivos americanos, comenzando por el iPhone.
Rápidamente ofreció un solución inmediata a sus ciudadanos, utilizar los terminales de Samsung, pero poco tiempo después mostró una solución más patriota con el Venus Vestel. Este teléfono tiene un diseño generalista, pero con unas prestaciones más humildes y diferentes variantes. El precio del Venus Vestel Z20 (el más alto de toda la gama) ronda los 360 euros al cambio.
El rival del iPhone en Turquía
Turquía es un país donde los producto de Apple están muy presentes, el propio Erdogan usó FaceTime para mandar un mensaje a la ciudadanía durante el frustrado golpe de estado del país en julio del 2016. Pero con las nuevas trabas del gobierno de los Estados Unidos, Erdogan anima a usar Samsung o los propios equipos desarrollados en Turquía.
Venus es un fabricante que exporta el 90% de sus televisores hacia otros países, además del 30% de los electrodomésticos como marca blanca. En el año 2014 decidieron lanzar el «rival del iPhone». Un terminal con unas prestaciones que actualmente quedarían situados en un gama media, pero ofreciendo hasta 3 años de garantía.
Aún así, Erdogan fue bastante duro con su discurso: «Si ellos tienen iPhone, está Samsung al otro lado; además, nosotros tenemos nuestro Venus Vestel». Vestel es una de las principales compañías de Turquía, pero a pesar de ello, en el trimestre pasado facturó el equivalente al 2,7% de lo facturado por Apple en el mismo periodo.