La Unión Europea acaba de multar a Google por posición dominante en las apps y servicios instalados en Android de manera predeterminada con una cantidad muy elevada, concretamente de 4.340 millones de euros. Es la cantidad más alta con la que se ha multado a una empresa de esta envergadura.
Bruselas achaca que Google aprovecha su posición dominante para ofrecer sus aplicaciones y servicios de forma predeterminada en los smartphones que son vendidos bajo su sistema operativo Android.
El CEO de Android afirma que los usuarios pueden eliminarlas en cualquier momento ya que se trata de un sistema operativo libre, mientras que en Apple no es posible. Pichai (CEO de Android) recurrirá la sanción de la UE.
La UE está premiando a Apple, según Pichai

Si nos ponemos en la posición del CEO de Android, tiene toda la razón del mundo al no estar de acuerdo con la sanción de la UE. Android es un sistema operativo de Google, donde instalan de manera predeterminada sus propias aplicaciones para ofrecer una serie de utilidades al usuario sin tener que buscar e instalar las aplicaciones más básicas, como Google Chrome. Hasta ahí tiene toda la lógica, pero la UE no lo ve de esa manera y también tienen razón para aplicar esta multa.
La UE alega que el motivo de la sanción es la compensación económica que Google realizó a grandes fabricantes y operadoras móviles para que instalasen de manera predeterminada algunos de sus servicios, como su propio motor de búsqueda o el propio navegador Google Chrome. Algo que imposibilitaría a otros desarrollares ofrecer una posible competencia a la gran «G».
No es la primera vez que una empresa se querella contra Google por este tipo de acciones del cual no les permitía competir directamente, perdiendo beneficios a un ritmo frenético. Así que la sanción de la UE vendría a confirmar la preocupación de desarrolladores y empresas que no pueden competir directamente con ellos.
«Hoy, gracias a Android, un móvil estándar viene precargado con hasta 40 aplicaciones de múltiples desarrolladores, no solo de la compañía que vendió el teléfono», afirmó Pichai en un comunicado. «Los fabricantes de móviles no están obligados a incluir nuestros servicios, y también son libres para preinstalar aplicaciones que compiten con las que nosotros desarrollamos. Esto significa que ganamos ingresos sólo si se instalan nuestras aplicaciones y si los usuarios eligen utilizar nuestras apps en lugar de las de los rivales».
Pichai también quiso añadir que Android puede ser modificado por cualquier usuario o desarrollador, ya que se trata de un sistema operativo abierto. En el caso de Apple, «son ellos quienes tienen la última palabra». Con este tipo de sanciones, Pichai cree que se está premiando la labor de Apple.
Lo cierto es que Apple no ofrece una posición dominante en este aspecto, ya que los californianos tienen un software que aplican en su propio hardware. Es decir, fabrican su propio smartphone y el sistema operativo que los acompaña bajo una misma marca.
Recordamos que Apple recibe una cantidad de dinero bastante elevada por incluir el buscador de Google de manera predeterminada en Safari. Esto último es lo que la Unión Europea afirma que es una posición dominante, no pudiendo dar la oportunidad a la competencia por los recursos limitados que estas poseen frente al gigante de Google.
¿Crees que la decisión de la UE es acertada? ¿La multa resulta desproporcionada?