En ocasiones, nuestros coches presentan problemas, e incluso salen iconos en el panel de los que no conocemos el motivo, y la única forma de averiguarlo es llevarlo al taller, para que, con una máquina, puedan descubrirlo y arreglarlo.
Sin embargo, ¿sabías que ese dispositivo lo puedes tener tú, de manera personal, por muy pocos euros, y que se conecte directamente a tu iPhone para ver las averías e incluso eliminar errores sin tener que pasar por un taller?
OBD de coche Bluetooth para iPhone
Los OBD son herramientas muy útiles que, como decíamos, se usan para detectar los fallos de un vehículo. Solo hay que conectarlos en su lugar correspondiente (todos los coches, aunque sean antiguos, lo tienen, y deberás buscar en qué lugar oculto se encuentra en tu modelo). Una vez realizado, a través de Bluetooth, nos podremos conectar con nuestro iPhone a este dispositivo, consiguiendo recopilar y ver toda esa información.
El lector de códigos de coche OBD2 posee la capacidad de interpretar y borrar una amplia gama de más de 3000 mensajes de error distintos. Muy útil si tu coche es viejo, ya que muchos no indican un problema, y solo nos aparece una llave inglesa como que hay un fallo, sin saber a qué se refiere. Con este aparato, lo descubriremos, y si lo podemos solucionar, también nos permitirá borrar, manualmente, el error, sin tener que llevarlo al mecánico, al menos de primeras.
Además, estos OBD no funcionan con una app propia, sino que nos permiten conectarnos a cualquiera que haya en la App Store, como Faslink X, DashCommand, Torque, Infocar, Auto Doctor, Four Stroke o OBD Fusion, por lo que dependerá de nuestros gustos, o lo que busquemos, el poder descargar una u otra para ver los fallos.
El precio de este producto ronda los 10 euros, y aunque existen varios modelos, os dejamos uno que, personalmente, me ha funcionado siempre muy bien, aunque podéis elegir cualquier otro de los que hay en Amazon u otras webs, aunque por el precio y la velocidad de envío, no le daría muchas vueltas.
Los coches estadounidenses fabricados después de 1996 suelen ser compatibles, mientras que los europeos pueden requerir una fecha de fabricación posterior a 2003.
Pese a que nos recomiendan que el coche tenga al menos estos años de fabricación, yo, personalmente, lo he probado en dos modelos de 2002, y también lo poseen, por lo que puedes buscar en Google tu coche, y, posiblemente, tenga esta opción, aunque nunca la hayas visto o no sepas exactamente dónde se conecta, pues suele estar bastante escondido, y no lo verás a simple vista.
Y tú, ¿conocías este tipo de dispositivos?, ¿sabías que tu coche, pese a ser antiguo, contaba con esta opción? Gracias a los sistemas Bluetooth, ahora es mucho más sencillo, ya que anteriormente había que conectar una máquina por cable, sin embargo, en este momento lo podemos hacer incluso desde un iPhone, algo mucho más sencillo y con mejores apps para visualizar todo de forma fácil, aunque no seamos un mecánico.