Cuidado con las fundas de Shein para iPhone: se me activa el botón de pago solo y es un grave problema
Las fundas para iPhone son mucho más que un accesorio estético para nuestro terminal, ya que cumplen una función crucial para proteger el dispositivo y mejorar nuestra experiencia de uso. Sin embargo, no todas cumplen con estas expectativas, y eso lo aprendí por las malas al comprar una funda de Shein que parecía prometedora, pero resultó ser un desastre.
La historia comienza con lo que parecía una ganga irresistible: una funda para iPhone con un diseño gráfico atractivo y un precio menor a dos euros. A primera vista, el producto parecía cumplir con lo que buscaba: proteger mi teléfono mientras lucía un diseño único. Sin embargo, pronto descubrí que la calidad dejaba mucho que desear, y el bajo coste no compensaba los problemas que trajo consigo.
Problemas técnicos: botones que se activan solos
El problema más alarmante con esta funda es que los botones laterales del iPhone, especialmente el de bloqueo, no funcionan correctamente. Al tocar ligeramente el botón, parece quedarse “atascado” en un estado de pulsación prolongada. Esto tiene una consecuencia especialmente grave: cada vez que intento bloquear el dispositivo, se activa Apple Pay sin que yo lo quiera.
Imagina ir por la calle, bloquear tu iPhone para guardarlo y, de repente, darte cuenta de que la pantalla del Apple Pay aparece repetidamente. No solo es molesto, sino que podría resultar peligroso en situaciones donde un pago accidental podría hacer que te queden sin dinero. No es algo sencillo, pero podría suceder y es una faena.
Este comportamiento errático del botón también afecta otras funciones del dispositivo. Las capturas de pantalla se disparan sin previo aviso, y el uso del asistente de voz Siri se activa en los momentos menos oportunos. Todo esto interfiere en la experiencia de usuario, convirtiendo el uso diario del iPhone en un verdadero suplicio.
La decepcionante calidad del diseño
Otro aspecto que dejó mucho que desear fue la calidad de la impresión en la parte trasera de la funda, que era el principal motivo por el que la compré. Lo que en las fotos promocionales de Shein parecía un diseño vibrante y detallado, haciendo alusión a Kodak, en la realidad resulta ser una impresión borrosa, con colores deslavados y letras que apenas se distinguen.
El desgaste de la impresión comenzó apenas días después de usar la funda. Bastaron un par de roces con el bolsillo del pantalón para que el gráfico comenzara a desvanecerse, dejando un acabado aún más descuidado. Esto no solo arruina la estética, sino que también deja claro que el material utilizado es de muy baja calidad.
Comprar fundas de menos de dos euros puede parecer tentador, pero suele implicar compromisos en calidad y funcionalidad. Estas fundas, como las de Shein, carecen de controles rigurosos, lo que se traduce en botones que se activan solos o diseños horribles. Además, los materiales no siempre encajan bien entre ellos, provocando errores en los botones que pueden dar lugar al uso accidental de Apple Pay. La experiencia demuestra que vale la pena invertir en productos de marcas fiables con buenas reseñas. Aunque cuesten más, garantizan mejor protección para tu iPhone y evitan complicaciones que pueden resultar costosas o peligrosas.
En este caso, lo barato salió caro. Mi consejo es claro: cuidado con las fundas de Shein. La próxima vez, optaré por una opción que ofrezca lo que promete, tanto en diseño como en funcionalidad.