El pasado día 14 de este mismo mes, veíamos como Apple lanzaba el nuevo iMac Pro, que llega con un alto potencial para los profesionales de sectores muy concretos, que puedan sacarle provecho al alto rendimiento que tiene. Este nuevo equipo tan Pro viene con un chip T2, que mejora la seguridad y que se encarga de hacer un arranque seguro, y tal y como ocurre en un iPhone o iPad, para realizar este arranque se requiere de otro dispositivo.
El iMac Pro, más difícil de restaurar en ciertos momentos
En ciertas ocasiones es posible que debamos de realizar una restauración en modo DFU, que seguro la relacionaréis con un dispositivo iOS, que básicamente es forzar la restauración por ejemplo cuando falla la instalación del sistema operativo. Para entrar en este modo DFU debemos de conectar nuestro iPhone a iTunes en Windows o Mac. Pues algo parecido pasa con el iMac Pro.
En la página web del soporte técnico de Apple dicen: «En determinadas circunstancias, como un fallo de alimentación eléctrica, durante una actualización de macOS, un iMac Pro puede no responder y debe restablecerse.»
Si por desgracia ocurren estos hechos en un iMac Pro, por culpa del chip T2 se debe de conectar con un cable USB-C a otro Mac para poder llevar a cabo la restauración utilizando un software de Apple, como es el Apple Configurator 2.6 que deberemos de tener instalado en el segundo Mac. En la propia web de Apple, que te dejamos aquí, puedes ver que los pasos de restauración son muy sencillos. De hecho no debería haber ningún problema de encendido del iMac ni nada similar si se siguen los pasos indicados.
Lo más complicado es tener un cable USB-C que se debería de incluir en la caja de iMac Pro (que menos por 5.500€ de base Apple), y además poder disponer de un segundo Mac. Obviamente esto es una mejora de seguridad por el chip T2, aunque sea un poco más «coñazo», es por nuestra seguridad para que este arranque seguro se realice con un programa autorizado por ellos.
Si hay que realizar una restauración normal, si se puede hacer como siempre, dejando esta excepción para cuando hay un grave problema en el Mac, dejándolo prácticamente inútil.