Apple se ve envuelta en un escándalo global: acusada de comerciar con minerales de guerra
La compañía de Cupertino se enfrenta a graves acusaciones que podrían remover negativamente su reputación global. Las filiales de la compañía, en Francia y Bélgica, han sido señaladas por la República Democrática del Congo (RDC) en una denuncia criminal que las acusa de manear bienes robados y blanquear minerales obtenidos en zonas de conflicto armado.
Este caso pone el foco sobre la ética de las grandes empresas tecnológicas y su responsabilidad en la cadena de suministro de materiales esenciales. Mucha atención a esta noticia porque Apple podría irse al traste.
¿Apple lava su imagen para encubrir crímenes?
Las denuncias, presentadas en París y Bruselas, alegan que Apple se ha beneficiado de minerales extraídos ilegalmente en la RDC, un país rico en recursos como estaño, tantalio y tungsteno, conocidos como “minerales 3T”, fundamentales para la fabricación de dispositivos electrónicos. Según los representantes legales del Congo, estos materiales habrían sido saqueados en regiones controladas por grupos armados, quienes los exportan mediante redes de contrabando hacia mercados internacionales.
Un punto clave del caso es la relación de Apple con ITSCI, un programa financiado por la industria de metales que tiene como objetivo verificar la procedencia ética de los minerales. La denuncia asegura que Apple utiliza este método como un mero instrumento para lavar su imagen, mientras cierra los ojos ante las irregularidades en su cadena de suministro. Cabe destacar que ITSCI fue suspendido por la Responsible Minerals Initiative (RMI), de la que Apple es miembro, lo que pone en entredicho la efectividad del programa.
Apple, por su parte, ha rechazado enérgicamente estas acusaciones. La compañía asegura que no adquiere minerales directamente y que somete a sus proveedores a auditorías regulares. En su informe anual de 2023 ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC), Apple afirmó que ninguno de sus proveedores de minerales 3T o de oro financió a grupos armados en el Congo o en países vecinos.
Un conflicto que lleva décadas de violencia
Desde los años 90, la competencia por el control de los recursos minerales ha alimentado la violencia en las regiones orientales de la RDC, dejando un saldo devastador de víctimas civiles y desplazados. Los grupos armados se financian con la explotación y exportación de estos materiales, lo que perpetúa un ciclo de conflicto que parece no tener fin.
El motivo de presentar las denuncias en Francia y Bélgica radica, según los abogados del Congo, en la reputación de estos países por priorizar la responsabilidad corporativa. Ahora, las autoridades judiciales de ambas naciones deberán determinar si las pruebas presentadas son suficientes para abrir una investigación formal y, eventualmente, presentar cargos penales contra Apple.
Este caso no solo amenaza con empañar la imagen de Apple, sino que también podría sentar un precedente para otras multinacionales que dependen de cadenas de suministro globales. ¿Están las grandes empresas realmente comprometidas con la ética en sus operaciones, o es el cumplimiento de la norma una simple fachada?
Por ahora, la batalla judicial apenas ha dado comienzo, pero lo que está claro es que el escrutinio público y legal sobre las prácticas de las grandes corporaciones será cada vez más intenso. Mientras tanto, millones de consumidores podrían comenzar a cuestionarse qué hay realmente detrás de los dispositivos que utilizan cada día.