Aunque a día de hoy, un iPhone es un dispositivo muy ligero, la tecnología actual es la que lo ha conseguido, pues si nos remontamos a hace 50 años, la cosa cambia, y todos los componentes de un teléfono actual, necesitarían un espacio enorme para ello.
En el día de hoy, vamos a ver esta curiosidad, que si bien ya es pasada, nos hace ver, de forma más realista, el cambio que ha supuesto toda la evolución tecnológica en tan poco tiempo, pues muchas personas mayores que tienen un iPhone ahora, vieron el nacimiento de la televisión en España, por ejemplo.
Cómo sería un iPhone hace 50 años
A la hora de hablar de sus componentes, hay mucho que ni siquiera existían, por lo que sería difícil de analizar, y, por tanto, más grande aún de lo que vamos a hablar hoy. Sin embargo, sí que podemos saber más o menos el tamaño de sus transistores, así como del espacio que necesitaríamos para almacenar 1 TB de datos, algo que un iPhone consigue reducir a milímetros hoy en día, pero que antiguamente no era tan fácil.
El chip A17 Pro del iPhone 15 Pro tiene alrededor de 19.000 millones de transistores en un espacio menor a 100 mm². En comparación, en los años 60 o 70 (por no irnos más atrás), los transistores de los ordenadores ocupaban varios centímetros cada uno, por lo que puedes ir calculando el tamaño.
Por otro lado, 1 TB de almacenamiento podemos encontrarlo, actualmente, en un chip del tamaño de una uña, sin embargo, en los años 60-70, el almacenamiento se hacía con discos magnéticos o cintas perforadas. Un disco IBM 305 RAMAC (1956) tenía 5 MB de capacidad y pesaba más de 1 tonelada, por lo que también puedes ir calculando su peso.
Sin contar pantallas y conectividades, en este momento tenemos una locura de dimensiones, ya que si hacemos un cálculo real, 1 GB de espacio ocuparía unas 200 toneladas de peso, mientras que a nivel de transistores, no entrarían en una ciudad, dado que tendríamos miles de millones de centímetros, algo inimaginable
¿Te imaginas cargar con un iPhone así? La verdad es que es absurdo como antiguamente un disco de solo 5 MB podía pesar 1.000 kg, lo cual no podrían levantar ni entre varias personas, y que ahora 1 TB pueda ocupar lo mismo que una uña.
Esto nos lleva a pensar qué ocurrirá en otros 50 años, ya que la tecnología y herramientas actuales podrían ayudarnos a avanzar incluso más rápido, aunque, ¿hacia dónde?, ¿falta algo por inventar tan impresionante como lo que hemos visto hasta ahora?
Y tú, ¿creías que un iPhone con la tecnología de hace décadas ocuparía tanto? Es cierto que todos sabemos la evolución de los componentes, sin embargo, es hasta exagerado para lo que podemos pensar, por lo que, aunque ya no sirva de mucho, nos queda este dato curioso. Déjanos un comentario con tus impresiones al respecto.