El iPhone SE de segunda generación ha sido el último en incorporar Touch ID como sistema de seguridad en un smartphone de Apple, algo que ya parecía abandonado desde los iPhone 8. Sin embargo los rumores de que regresará con los iPhone 13 de este año es cada vez más fuerte. A continuación te contamos la última hora de este regreso, el cual tiene pinta de ser una de las grandes novedades de este año a la par que una de las más esperadas por parte de los usuarios de la marca californiana.
Bajo pantalla y sin decir adiós al Face ID
Han sido varios los analistas que han predicho que la próxima generación de Apple tendrá de nuevo Touch ID, aunque sin renunciar al ya asentado Face ID que la compañía sigue teniendo como el mejor del mercado, tanto a nivel de eficiencia como de seguridad. Mark Gurman, Ming-Chi Kuo o Jon Prosser son tres de los principales gurús que han dado esta información, a lo cual se suma ahora Joanna Stern, analista de The Wall Street Journal que también habló al respecto de estas informaciones en un artículo reciente.
La periodista afirma haber escuchado a un ex empleado de la compañía confirmar que Apple está trabajando en una curiosa variante de sensor de huellas bajo pantalla. La gran mayoría de dispositivos Android como los últimos Galaxy S21 de Samsung incorporan sensores ultrasónicos, pero parece ser que Apple apostaría por un híbrido entre sensores ópticos y capacitivos que, según cuentan, serían más seguros que el resto de sensores del mercado.
Los expertos en la materia aseguran que, al menos a día de hoy, las soluciones ultrasónicas siguen siendo las más seguras para el desbloqueo por huella dactilar. No obstante es complicado imaginarse a Apple presentando un dispositivo cuyos métodos de seguridad sean inferiores a los de la competencia y más cuando va a ser la última gran compañía en incorporarlo. Eso no solo rompería con lo de que Apple aunque llegue tarde, siempre lo hace mejor, sino que rompería con una de las principales bazas de la compañía en el ámbito de la seguridad y privacidad. Por tanto habrá que seguir esperando para conocer de qué forma asegura la compañía que su sensor sea de los más seguros.
¿Por qué vuelve ahora Touch ID al iPhone?
Fue en 2017 cuando comenzó el auge de las patentes de Apple por obtener un sensor de huellas en pantalla, una tecnología que por entonces no había sido explorada por marcas de renombre. Sin embargo la compañía pareció desistir de este sistema y apostó todo por Face ID. Cuatro años después y con un mercado en el que los sensores bajo pantalla son tendencia clara, Apple no ha apostado todavía por ello en ninguno de sus iPhone. ¿Por qué ha tardado tanto la compañía en querer incorporar estos sensores?
Por lo que se sabe, en Cupertino no tenían ya en sus planes el regreso de Touch ID. Fueron uno de los principales impulsores de esta tecnología cuando el iPhone 5s lo incorporó por primera vez, pero con la llegada de Face ID creyeron innecesario otro sistema biométrico más. Sin embargo ha sido la pandemia de la COVID-19 la que habría hecho que cambiasen de idea, ya que por todos es sabido los numerosos problemas que trae desbloquear un iPhone con Face ID si se lleva una mascarilla. De hecho los iPhone 12 podrían ya haber incorporado algo similar, pero el hecho de que la pandemia surgiese con el desarrollo ya completado hizo que fuera imposible añadirlo, ya que al final eso hubiera hecho que los teléfonos se retrasasen todavía más de lo que lo hicieron.
Lo que está por ver es la forma en la que Apple implementa sus dos sistemas de seguridad, si podrán configurarse para usar cualquiera de ellos o si incluso es posible tener una opción que solo desbloquee el dispositivo si se detecta tanto huella como rostro. En cualquier caso habrá que esperar unos meses más para seguir conociendo información al respecto, ya que se espera que los nuevos teléfonos de la marca de la manzana sean presentados en septiembre.