El iPhone esconde entre sus ajustes algunas funciones que no todo el mundo conoce, pero que pueden marcar una gran diferencia en el día a día. Una de ellas es la posibilidad de utilizar el flash LED de la cámara trasera como indicador de notificaciones.
Sí, el mismo flash que se activa para hacer fotos también puede parpadear cuando recibes un mensaje, una llamada o una alerta importante. Y aunque parezca que no, es realmente útil en ciertas situaciones.
Cómo configurar las notificaciones con flash en iPhone
Activar esta característica es muy sencillo, pero Apple la tiene un poco escondida, probablemente porque se desarrolló como una función de accesibilidad pensada para personas con problemas auditivos. Sin embargo, cualquier usuario puede aprovecharla. Para activarla, basta con ir a Ajustes > Accesibilidad > Audio y efectos visuales > Avisos LED intermitentes (abajo del todo), y activar la opción. Si quieres que solo se active cuando el iPhone esté en silencio, puedes marcar también la casilla de “Parpadear con el silencio activado”. A partir de ese momento, cada vez que recibas una notificación, el flash trasero parpadeará de forma intermitente.
¿Y por qué es útil esto en pleno 2025, cuando llevamos más de una década recibiendo notificaciones sin parar? Precisamente por eso. En un mundo saturado de estímulos, muchos usuarios han optado por reducir el uso de sonidos y vibraciones para tener un mayor control de su atención. Pero silenciar el iPhone puede hacer que te pierdas llamadas importantes o mensajes urgentes. El flash, en cambio, es una alerta visual que no interrumpe a nadie, no hace ruido y es efectiva incluso en entornos ruidosos.
También hay un segundo escenario en el que esta función es útil y es cuando tienes el iPhone boca abajo o no lo llevas encima. Por ejemplo, si estás esperando un mensaje mientras trabajas en el Mac, un destello del flash puede alertarte sin necesidad de mirar la pantalla. Incluso puede servirte como ayuda en la oscuridad, si duermes con el iPhone cerca y tienes activadas las notificaciones solo de ciertos contactos o apps importantes.
Es cierto que no se trata de una función revolucionaria, pero es un buen ejemplo de cómo Apple cuida los pequeños detalles. Muchos usuarios de Android ya contaban con funciones similares hace años, pero en el ecosistema Apple no es tan común ver estas opciones más visuales, y por eso puede pasar desapercibida. Lo interesante es que Apple no la presenta como una función estrella, sino que la deja en manos del usuario que quiera explorar y personalizar su experiencia.
Eso sí, hay que tener en cuenta un par de cosas. La primera, que el flash puede agotar algo más la batería si se activa con mucha frecuencia, aunque el impacto es muy bajo. Y la segunda, que si eres de los que deja el iPhone boca arriba en una habitación oscura, puede resultar un poco molesto que empiece a parpadear en mitad de la noche. Pero más allá de eso, es una herramienta sencilla y efectiva que mejora el uso diario del dispositivo, especialmente si sabes cuándo y cómo utilizarla.
En definitiva, es uno de esos pequeños trucos del iPhone que no todo el mundo conoce, pero que puede marcar una gran diferencia si sabes sacarle partido. Una opción más que demuestra que el iPhone es mucho más inteligente de lo que parece.