El Mac mini y el Mac Studio son dos dispositivos que, a priori, pueden parecer diferentes, es decir, pueden parecer equipos que no están pensados para mismo grupo de usuarios, tanto por sus prestaciones e internas como por su precio. Sin embargo, ¿conoces verdaderamente sus diferencias? Y, ¿ambos sirven para tú trabajo? En este post vamos a analizar sus diferencias de hardware y analizaremos cuál el dispositivo que mejor se adapta a ti.
Menos de la mitad, pero más de lo necesario
Desde un punto de vista del diseño, el Mac Studio es el doble de grande que un Mac mini, el cual es un dispositivo con un grosor muy comedido y que puedes llevarte a cualquier sitio para trabajar con él.
Esta reducción de tamaño también afecta a todos los componentes internos, y también a los periféricos, ya que el Mac Studio cuenta con una infinidad de puertos y mejor posicionados, como la tarjeta SD y los dos puertos Thunderbolt 4 en la parte delantera y cuatro en la parte trasera, mientras que, el Mac mini tiene 4 puertos, pero todos en la parte de atrás. Luego comparten el cable de Ethernet, HDMI, entrada de Jack 3.5 mm y dos puertos UBS-A.
Como ya sabéis, ambas unidades necesitan Magic Mouse, pantalla y teclado, porque solo venden el equipo, no incluye el resto de accesorios como el iMac. Con relación a ello, el Mac mini lo puedes conectar hasta tres monitores externos, mientras que, el Mac Studio hasta 4 monitores Pro Display XDR.
La verdad se oculta en el interior
En el interior de ambos equipos es donde más se observan las diferencias. El Mac Studio básico, que porta el chip M1 Max y que cuenta con 10 núcleos de CPU, 24 núcleos GPU y 16 núcleos de Neural Engine. En cambio, en el Mac mini con el Apple Silicon M2 pro, tiene 10 núcleos de CPU y 16 núcleos de GPU de segunda generación. Ahora bien, a pesar de que el pequeño de la familia Mac tiene componentes más recientes, el Mac Studio sigue siendo mejor que el Mac mini, no solo por las prestaciones mencionadas, sino porque también en su versión de entrada, parte de 32 GB y el M2 Pro parte de 16 GB.
Desde un punto de vista de rendimiento, son dos dispositivos que son capaces de realizar cualquier tarea, tanto por conectividad como por redimiendo gracias a sus procesadores, pero, ¿cuál es la mejor opción para ti?
¿Cuál es mejor para ti?
Si volvemos al diseño de cada uno de ellos, el Mac mini tiene un diseño mucho más comedido, mientras que, el Mac Studio tiene mucho mas espacio que facilita la disipación del calor. Por tanto, antes de decantarte por uno de ellos, tienes que analizar el uso que le vas a dar y sobre todo, la duración o el tiempo de uso que vas a utilizar. Si trabajar con proyectos muy pesados, el Mac mini puede solventarlos sin problemas, pero el calor que va a generar puede ser un problema con el paso del tiempo, además de que, si vas a trabajar intensamente, los 16 GB de RAM se van a quedar corto y la refrigeración del Mac Studio va a ser mucho más eficiente.
En un test, los resultados pueden ser muy parejos, pero a la larga, es cuando se observa el rendimiento real de los equipos, tenemos que tener cuidado de no tener el equipo siempre a temperaturas de 80-85 grados, porque puede acabar rompiéndose.