Pese a que el lanzamiento de macOS Tahoe 26.1 todavía no está listo para el público general, Apple ya ha lanzado la beta final de la versión, lo que quiere decir que, posiblemente en unos días, la podamos descargar todos, si no queremos hacerlo con una beta.
Lo que sí sabemos, es todo lo que esta trae, y no son pocas cosas, por lo que en el día de hoy, las repasaremos, para que conozcas, de primera mano, si realmente tiene algo que te resulte útil, y puedas plantearte instalarla en el momento en el que salga, o esperar sin prisa.
Versión final de macOS Tahoe 26.1: qué trae
La nueva versión de macOS Tahoe 26.1 llega como una actualización enfocada en pulir la experiencia y mejorar detalles que se notan en el día a día. No cambia radicalmente el sistema (ya que no es una versión nueva, sino una actualización de macOS 26), pero sí lo hace sentir más fluido, más bonito y un poco más inteligente. Apple ha trabajado en optimizar la interfaz, mejorar la calidad del sonido en videollamadas y reforzar la seguridad para los usuarios más jóvenes. Es una de esas actualizaciones que no gritan “gran novedad”, pero que sí hacen que todo funcione mejor.
- Nuevo acabado “Liquid Glass”: permite elegir entre el estilo transparente habitual o una versión más opaca con un tinte suave, ideal si prefieres menos brillo o distracciones.
- AutoMix en Apple Music vía AirPlay: ahora puedes disfrutar de mezclas automáticas cuando envías música a altavoces u otros dispositivos externos, sin interrupciones.
- Mejoras en FaceTime: el audio se mantiene más claro incluso cuando la conexión a internet no es la mejor, para que las conversaciones suenen naturales.
- Controles parentales más sólidos: las cuentas de adolescentes (13-17 años, según región) activan automáticamente los filtros de seguridad en mensajes y navegación, ofreciendo una experiencia más segura.
En resumen, macOS Tahoe 26.1 no llega con grandes anuncios ni funciones revolucionarias, pero se nota que Apple ha puesto cariño en los pequeños detalles. Es de esas actualizaciones que no cambian la forma en la que usas tu Mac, pero sí mejoran la sensación general al hacerlo: las animaciones son más suaves, las transiciones más limpias y todo parece responder con un poco más de soltura.
También hay un enfoque claro en la comodidad del usuario, desde el nuevo acabado visual más relajado (que muchos pedíamos) hasta las mejoras en el audio y la seguridad. Son matices que, sumados, hacen que el sistema se sienta más pulido y coherente. Si usas tu Mac todos los días para trabajar, estudiar o simplemente entretenerte, notarás ese “algo” que lo hace más agradable. No es una revolución, pero sí una actualización que realmente vale la pena instalar.
Todo esto sin conocer el rendimiento de la batería, o las mejoras en seguridad. Pequeños puntos que Apple siempre toca, pese a que no los agregue a sus novedades principales, y que pueden hacer que muchos lo noten en su día a día, sobre todo en ordenadores más antiguos. Y tú, ¿qué opinas de esta nueva versión?
