Así de claro, si los usuarios de Android tienden a cambiar más de teléfono respecto a los usuarios de Apple será por algo. A continuación te mostramos las conclusiones que se pueden extraer de un estudio realizado en Estados Unidos sobre este tema.
Al parecer, en Estados Unidos, a pesar de existir una paridad aparente en el uso de iPhones y teléfonos Android, los propietarios de iPhones tienden a conservar sus dispositivos por más tiempo. ¿A qué se debe esta tendencia, y cuál es el secreto de Apple?
El iPhone es mejor y más longevo
Según informes recientes del Consumer Intelligence Research Partners, los usuarios que utilizan un iPhone como teléfono principal están reemplazando sus dispositivos con menos frecuencia que los usuarios de Android. Un dato importante y a destacar es que el 61% de los compradores de iPhone tenían su dispositivo anterior durante dos años o más, en comparación con el 43% de los propietarios de Android. Además, el 29% de los propietarios de iPhone habían conservado su dispositivo anterior durante tres años o más, mientras que solo el 21% de los usuarios de Android habían hecho lo mismo.
Este fenómeno desafía algunas creencias comunes, como la idea de que los propietarios de iPhones tienden a ser “marquistas” y gastar más dinero cada año en la compra de una nueva generación de iPhone. También desmiente la idea de que los usuarios de Android son más orientados al presupuesto, y es que al final lo barato sale caro. Sin embargo, los datos demuestran que la situación es más compleja de lo que parece.
Una de las razones clave es la estrategia de actualización de los dos ecosistemas. Apple lanza solamente una actualización anual del iPhone, lo que proporciona a los usuarios un incentivo anual para considerar la compra de un nuevo dispositivo. En cambio, el ecosistema de Android, que incluye marcas como Samsung, Google y OnePlus, puede ofrecer múltiples nuevos lanzamientos a lo largo del año.
¿Ofrece el iPhone una mayor calidad?
Esta diferencia en la frecuencia de las actualizaciones hace que los usuarios de Android tengan más oportunidades para considerar la actualización, incluso si existe lealtad a la marca dentro de la comunidad de Android. Los propietarios de iPhones, en cambio, tienen un solo incentivo anual para actualizar, a veces dos si Apple lanza un nuevo color sobre un mismo modelo como ha pasado en los últimos años, lo que podría afectar en una menor tasa de reemplazo.
Otra explicación es la durabilidad y fiabilidad del iPhone. A lo largo de los años, Apple se ha ganado una reputación por la calidad de construcción de sus dispositivos. Los propietarios de iPhones a menudo destacan la durabilidad de sus teléfonos y la satisfacción general con el uso del iPhone. No podemos decir lo mismo de algunas marcas de teléfonos Android.
Por tanto, la longevidad de los iPhones en comparación con los teléfonos Android es un fenómeno muy interesante que plantea preguntas sobre las estrategias de actualización de Apple y Android, la durabilidad de los dispositivos y el comportamiento del consumidor en general. ¿Y tú? ¿Cada cuánto cambias de smartphone?