Aún no contamos con datos oficiales ni sólidos sobre el iPhone 17, cuyo lanzamiento está previsto para finales de este año, y sin embargo ya empiezan a circular rumores importantes sobre el iPhone 18, que llegará en 2026. Lo preocupante es que estas filtraciones no giran en torno a sus novedades o diseño, sino a algo mucho más sensible para el consumidor: su precio.
Todo apunta a que el coste del dispositivo se disparará de forma considerable, hasta el punto de que muchos usuarios podrían plantearse seriamente si merece la pena seguir apostando por el iPhone.
Precio del iPhone 18
Según las últimas filtraciones que llegan de fuentes fiables del entorno asiático, Apple tiene previsto integrar un nuevo procesador fabricado con tecnología de 2 nanómetros, una novedad que supondrá un salto enorme en eficiencia y rendimiento, pero también en costes. Y como suele ocurrir, esos costes podrían acabar pagándolos los consumidores.
La compañía taiwanesa TSMC será la encargada de fabricar el chip A20 que montarán los iPhone 18, utilizando por primera vez un proceso de fabricación de 2 nm para reducir aún más el tamaño de los transistores, permitiendo introducir muchos más en el mismo espacio. Así se dará lugar a un procesador mucho más potente y eficiente, ideal para seguir impulsando funciones de inteligencia artificial, juegos avanzados y todo lo que Apple quiere potenciar en sus próximos dispositivos. Pero aquí viene el problema: producir estos chips es mucho más caro.
Para hacernos una idea, Apple ya dio el salto de los 5 nm a los 3 nm con el A17 Pro del iPhone 15 Pro, lo que supuso una mejora del 20 % en el rendimiento gráfico, un 10 % en la CPU y una duplicación de la potencia del motor neuronal. Sin embargo, ese avance también trajo un aumento considerable de los costes de producción. Ahora, con el salto a los 2 nm, los analistas creen que el precio se disparará aún más, por lo que Apple tendrá que decidir si asumir el sobrecoste o derivarlo al consumidor.
¿Apple tendrá que pagar aranceles?
Por si fuera poco, la situación entre Apple y Donald Trump, a raíz de los polémicos aranceles, podría agravar más la situación. A pesar de que los chicos de Tim Cook, por el momento, evitarán estas tasas arancelarias, habrá un impacto directo en los costes de importación de una u otra manera. Además, TSMC está construyendo dos nuevas plantas para poder fabricar estos chips de 2 nm a gran escala y ya ha solicitado permisos para una tercera. Esto no solo confirma que la demanda será altísima, sino que también implica una inversión colosal que, tarde o temprano, se verá reflejada en los precios de los dispositivos que los utilicen.
En definitiva, el iPhone 18 promete ser una auténtica bestia en términos de potencia, eficiencia energética y nuevas funciones, pero su precio podría dejar fuera de juego a muchos usuarios. El salto a los 2 nanómetros será un hito tecnológico, sí, pero también un nuevo capítulo en la escalada de precios que Apple lleva protagonizando durante los últimos años. Y aunque el iPhone 18 aún esté a más de un año de distancia, conviene ir preparándose: el futuro pinta brillante… y caro.