Estaba claro que la empresa más valiosa del mundo lograría llegar a un acuerdo con la Administración Trump para evitar los excesivos aranceles que el presidente estadounidense pretende imponer. Finalmente, ese acuerdo se ha materializado y Apple no tendrá que asumir tasas en la mayoría de sus productos. Sin embargo, algunos dispositivos sí se verán afectados.
Sigue leyendo atentamente este artículo si quieres conocer si tu próximo iPhone tendrá un precio mayor a lo que estamos acostumbrado o no. Te contamos todo.
Precio de los productos de Apple tras los aranceles, ¿cuáles suben?
Apple ha vuelto a salir airosa de una jugada comercial que podría haber cambiado radicalmente el precio de sus dispositivos. En un inesperado giro de los acontecimientos, la Administración Trump ha decidido eximir a los iPhone, Mac, iPad, Apple Watch y otros productos de la marca de los nuevos aranceles del 125% que se aplican a los bienes importados desde China. La noticia, revelada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, supone un auténtico alivio para millones de usuarios. Sin embargo, no se menciona en este categoría de productos exentos los famosos AirPods de Apple, por lo que estaremos atentos para ver si su precio sube o no.
La medida llega en un momento en el que las tensiones entre Estados Unidos y China van en aumento, con continuos cambios en ambos sentidos en materia de aranceles, como respuesta a las medidas del otro. Sin embargo, el gobierno ha optado por incluir una lista de excepciones donde figuran no solo los productos de Apple, sino también otros artículos clave como GPUs de Nvidia, semiconductores, pantallas, discos de almacenamiento SSD y hasta algunos televisores. En cambio, dispositivos como la Nintendo Switch 2 sí se verán afectados por los aranceles.
Aunque esta exención no es definitiva y podría ser revisada en los próximos meses, es un respiro para Apple, que estaba en el punto de mira desde que se intensificaron las tensiones comerciales. Una subida del 125% en los costes de importación habría obligado a la empresa a tomar decisiones drásticas: desde encarecer sus productos a reducir márgenes, deslocalizar parte de su producción o incluso posponer lanzamientos. Nada de eso ocurrirá, al menos por ahora.
Apple pagará una tasa del 20%
Aun así, Apple no sale completamente indemne. La compañía seguirá obligada a pagar una tasa del 20%, conocida como “fentanyl fee”, una penalización previa impuesta específicamente a productos provenientes de China, vinculada a cuestiones de seguridad nacional. Aunque esta tarifa es menor, sigue teniendo un impacto económico considerable y demuestra que, a pesar de la exención de aranceles, la presión comercial sigue muy presente.
En paralelo, la volatilidad del mercado ha golpeado duramente a las acciones de Apple. Durante la última semana, y en medio de la incertidumbre, los títulos de la compañía llegaron a caer más de un 20%. Sin embargo, ya vemos evidentes signos de recuperación, con cifras esperanzadoras en Wall Street, ya que la compañía californiana está recuperando varios puntos en la jornada de hoy.
Esta decisión no solo afecta al bolsillo de Apple, sino también al de los consumidores. De haberse aplicado los aranceles, el precio de un iPhone 16 podría haberse disparado más allá de los 2.000 euros en algunos países, y el de un MacBook habría subido varios cientos de euros.
No está claro si esta medida responde a una presión por parte de los gigantes tecnológicos, a una estrategia para frenar la inflación, o a un simple movimiento estratégico. Lo que sí es evidente es que Apple ha esquivado una bala de gran calibre.