Ahora que ya tenemos la nueva remesa de los iPhone de nueva generación, vamos conociendo más y más detalles sobre ellos. La resistencia al agua es un apartado de estos teléfonos que muchos usuarios consideramos importante, ya que es una capa de protección adicional, que evitará que el dispositivo llegue a dañarse, en caso de que entre en contacto con el agua u otros líquidos. Así que en este post vamos a ver las resistencias al agua que tienen todos los nuevos modelos.
Si bien, este tipo de protección no es infalible y con el paso del tiempo se irá desgastando. Incluso, la propia Apple ya ha manifestado de forma activa que la garantía no cubre los daños por agua. Así que hay que actuar con responsabilidad, cuando vayamos a exponer el iPhone al agua, y no excedernos más allá de lo que recomienda la protección indicada.
Grados de resistencia al agua de los iPhone 15 y 15 Pro
La resistencia al agua en los dispositivos electrónicos se mide mediante la escala de medición IP. Esta consta de dos números. El primero de ellos, va de la X al 6, siendo la X nula protección, y 6, la máxima. Este primer número es el indicador de protección frente al polvo. Aunque parezca algo inocuo, las motas de polvo que se acumulan en ciertas partes del iPhone pueden hacer que elementos coló los altavoces o los micrófonos no funcionen al 100% de rendimiento, pasado un tiempo. Además, también asegura que la parte interior del teléfono esté limpia y estanca del exterior.
El segundo número en la escala de medición IP, va de la X al 9. Siendo la X, protección nula y el 9, el grado más alto de protección. En este caso, estamos hablando de la resistencia frente al agua. Este apartado es muy importante, ya que no todas las aguas son iguales.
El agua salada no es lo mismo que el agua dulce
Cuando nos referimos a que un dispositivo electrónico, sea cuál sea, es resistente al agua, es en agua dulce. El agua salada, al contener sal y otros minerales es el mejor aliado de la corrosión de los componentes, tanto de la parte más externa, como de la más interna del dispositivo. Y aunque el agua no entre de primeras, es esta sal la que acaba desgastando la protección, haciendo que vaya perdiendo efectividad de una forma más rápida.
La protección frente al agua, también se mide en escala de tiempo y de profundidad. Estos números de la escala IP también proporcionan información sobre el tiempo máximo de exposición y a cuánta profundidad. Así que tener en cuenta estos dos factores, a la hora de exponer el iPhone al agua, es también muy importante para no excederse, y así dañar el dispositivo por culpa de agua o líquidos.
Así pues, una vez dicho todo esto, los iPhone tienen las siguientes protecciones:
- iPhone 15: IP68 según la norma IEC 60529. Hasta 6 metros de profundidad, durante un máximo de 30 minutos.
- iPhone 15 Plus: IP68 según la norma IEC 60529. Hasta 6 metros de profundidad, durante un máximo de 30 minutos.
- iPhone 15 Pro: IP68 según la norma IEC 60529. Hasta 6 metros de profundidad, durante un máximo de 30 minutos.
- iPhone 15 Pro Max: IP68 según la norma IEC 60529. Hasta 6 metros de profundidad, durante un máximo de 30 minutos.
Como prevenir los daños por agua en el iPhone 15
Como hemos dicho al principio, los daños por agua en el iPhone 15 (y en cualquier otro modelo de iPhone) no están cubiertos por la garantía de Apple, y esta expirará su cobertura si se detectan problemas por agua y líquidos. Y a pesar de que estos teléfonos son resistentes al agua (pero no son infalibles) a continuación te vamos a enseñar algunos trucos que te pueden venir muy bien, para alargar lo máximo posible este tipo de resistencia, y evitar que acumulemos humedad en sitios que no queremos, así como evitar una sobreexposición.
El estado físico del teléfono
Una de las cosas más importantes a tener en cuenta es que, para evitar la filtración de agua o líquidos en el interior del teléfono, este no debe presentar ninguna rotura. En caso de que el dispositivo se haya llevado algún golpe y tenga rasguños o grietas, ya sea en la pantalla, en la parte trasera, en los laterales o en las cámaras, la protección contra el agua se anula o al menos disminuye significativamente, permitiendo que el líquido tenga un camino directo para llegar al interior del dispositivo.
También es muy importante que te asegures que la ranura de tarjetas SIM está apropiadamente colocada en su sitio y bien cerrada. Esto es muy importante, ya que, de lo contrario, vamos a tener otra vía libre de entrada de agua al interior del dispositivo.
Eliminar bien los restos de agua de tu iPhone
Si el iPhone ha estado en contacto con agua salada, es importante eliminar inmediatamente, o lo antes posible, cualquier residuo de sal que pueda haber quedado incrustado. Se recomienda enjuagarlo rápidamente con agua dulce del grifo a una temperatura adecuada, evitando exponerlo prolongadamente. Cuando lo vayas a secar, ten en cuenta los diferentes componentes del iPhone que están a la vista quedan libres de agua.
En esta situación, lo más acertado sería dejar el iPhone sin cargar durante varias horas en un entorno seco, permitiendo que cualquier rastro de agua restante se evapore hasta asegurarnos de que el dispositivo está seco por completo. Si crees que el agua se ha podido acumular dentro del puerto de carga, entre los botones o en los altavoces, podrías utilizar un secador de pelo para secar esas partes del iPhone con mayor precisión. Si crees que el puerto de carga ha estado expuesto a una cantidad de agua considerable, se aconseja dejar el iPhone sin carga durante una o dos horas adicionales.
Sin embargo, lo más importante será eliminar cualquier resto de líquido sustancia que no sea agua pura, por eso no te preocupes en meter tu iPhone debajo de un grifo. Si no tiene problemas de fábrica, la resistencia al mismo hará que no tenga ningún error, pudiendo eliminar problemas como la corrosión por la sal.
El problema que tienen muchas personas es que al mojárseles el iPhone, ven que, por lo que sea, el terminal no enciende, y entonces entran en pánico y tratan de hacer que funcione por todos los medios posibles. Uno de ellos —el más habitual— consiste en enchufar el teléfono a la corriente, y ahí es cuando el iPhone sí que sí, se estropea. La resistencia al agua del iPhone no está pensada para que se pueda utilizar debajo del agua, como si lo está, por ejemplo la del Apple Watch. Simplemente se plantea como un método de seguridad en caso de que se nos moje. Si tu iPhone se cae al agua o entra en contacto con un líquido, lo mejor siempre será dejarlo en un lugar fresco, seco, y en el que corra el aire para que se seque. No hay que meterlo en arroz, como muchos piensan, ya que curiosamente eso puede dañar el dispositivo. Si el iPhone estaba apagado, déjalo apagado, y si estaba encendido, no hagas nada, pero no lo enchufes.
Alternativa mediante funda
Si tu iPhone no tiene una buena resistencia IP, o simplemente ha tenido un golpe y observas grietas o defectos que puedan haber alterado esta, siempre tenemos una opción B, y es a través de fundas de submarinismo, las cuales están pensadas para sumergir tu teléfono sin ningún riesgo, sea la versión que sea.
Hay que decir que no son baratas, pero tendrás una buena protección para cualquier modelo. Además, con su botón de acción, podrás realizar fotos u otras tareas sin necesidad de sacar el teléfono de la misma. Son ideales si quieres proteger al máximo tu iPhone.