Soy periodista y trabajo desde casa. En un medio de comunicación especializado en Apple. Además de escribir sobre todo lo que ocurre alrededor del mundo de la manzana mordida, también soy usuario desde hace muchos años, de todo lo que tenga el logo de una fruta y tenga una interfaz con la que interactuar. Por ello, en este post te vengo a contar cuál es mi setup ideal.
Aquí no te voy a contar que me gustaría comprarme el ordenador más caro y potente de todos. Ni tampoco, que me vaya a comprar 170 pantallas para tener todo un setup de YouTube norteamericano. Te voy a contar qué es lo que me gustaría tener (y quiero tener en un futuro) en base al uso que les doy a mis productos.
Por lo tanto, te voy a estar hablando de cosas que me voy a terminar comprando (espero que dentro de no mucho tiempo). Y si tú estás pensando en comprar productos de Apple para trabajar desde casa, y no tienes ideas, quizás esto te ayuda.
El ordenador, la base de todo
Utilizo un MacBook Pro de 13 pulgadas, del 2017 como equipo de trabajo principal. De cara a mi setup ideal, el que me quiero comprar es un iMac de 24″ con procesador M3. No edito vídeos de forma constante, ni tampoco audio. Escribo y hago diseño la mayor parte del día. Por lo que la potencia del M3 me va a ser más que suficiente.
ima
Tanto por el diseño (que me encanta) como por la calidad del panel, el iMac es el equipo que mejor me va a venir, sobre todo, de cara también a optimizar mi espacio de trabajo. Pero el iMac no vendrá sólo, ya que trabajo con dos pantallas.
¿Y cuál va a ser el monitor a por el que apueste? La Apple Studio Display. Su tamaño de 27 pulgadas, su resolución y la fidelidad de los colores encajan perfectamente con el iMac, ya que este es compatible con un segundo monitor externo.
Un portátil
Al trabajar con un Mac portátil estoy acostumbrado a poder hacer tareas de todo tipo en movilidad. Sin embargo, donde ahora hay un Mac, habrá un iMac. Entonces, ¿Y el portátil? Tengo decidido que mi próximo ordenador portátil va a ser un iPad Pro. Y la propia Apple me ha dado razones para dar este salto.
La versatilidad del puerto Thunderbolt, las funciones añadidas que hemos ido viendo con iPadOS a lo largo de los años y el uso típico que le doy, básicamente escribir y diseñar, se adaptan perfectamente. Por lo que, si a esto le añadimos que tengo iCloud y memorias externas para guardar mis proyectos, mi iPad ideal es el iPad Pro de 12,9″ de 128GB Wi-Fi y Cellular.
Al trabajar siempre en movilidad con el iPad quiero poder aprovechar las funciones de red móvil, para poder conectarme donde y cuando quiera, sin tener que depender de un iPhone.
Y los accesorios
Además del ecosistema de productos principales, no hay que olvidar los accesorios más pequeños que me acompañan en este setup. Para mi, hay algo muy importante y es el tema del sonido. Cuando hago reuniones, tengo que cubrir eventos en directo o, simplemente quiero poner música para concentrarme, unos auriculares de calidad son imprescindibles. Por lo tanto, y sin salir del ecosistema de Apple, tengo un candidato que se ajusta a mis necesidades: Beats Studio Pro.
Para acabar de vestir al iPad, tengo claro que apostaré por el Magic Keyboard y el Apple Pencil 2 (o 3, quién sabe). Y para el iMac, sí o sí quiero Magic Trackpad. La versatilidad que me aporta esta herramienta es enorme, así como la comodidad que me da el poder moverme más libremente, a través de gestos por toda la interfaz.