La nueva plataforma que Apple ha inaugurado con su nuevo visor abre un abanico inconmensurable de nuevas posibilidades. Ahora bien, las Visión Pro, aún ser unas gafas, no tienen nada que ver con lo que tengamos actualmente en productos «similares» de la competencia. Y es que, este nuevo dispositivo, tal y cómo lo llama la compañía, se trata de un «ordenador espacial». Así que en este post haremos un repaso de lo que realmente marca la diferencia en este producto.
La realidad a tu gusto y sin aislarte del mundo
Hasta ahora, todo lo que estábamos acostumbrados a ver, era que la realidad virtual te trasladaba a un mundo diferente del que estábamos en ese momento. Escenarios completamente inmersivos y sólo vemos lo que las gafas nos muestran. Y no tenemos consciencia (a menos que nos quitemos las gafas) de lo que ocurre en nuestro alrededor.
Por otra parte, la realidad aumentada era, simplemente, ver objetos proyectados en un escenario real, pero a través de una pantalla. Pero las Apple Visión Pro toman estas ideas, y las remecían por completo:
- Podemos elegir el grado de inmersión en todo momento, y nunca perdemos el contacto con la realidad física que nos rodea.
- No se crea «un mundo nuevo», sino que se utiliza nuestra realidad para proyectar todas las funciones virtuales. Nuestro entorno es el escritorio del ordenador.
- Se trata de una combinación de realidad aumentada y realidad virtual, y se crea este nuevo concepto de «realidad mixta».
Nosotros tomamos el mando, literalmente
Todo lo que hemos visto hasta ahora es que, para interactuar con este tipo de visores, teníamos que emplear periféricos y sensores para manejarnos por el entorno virtual. Nuestra movilidad estaba reducida, dentro de la interfaz. Y hasta la fecha eso había sido uno de los grandes limitantes.
Apple Vision Pro, al ser un entorno de «realidad mixta» y gracias a la inconmensurable cantidad de sensores que incorpora, rompe la limitación de movimiento. Literalmente, con nuestras manos y nuestros ojos interactuamos al 100% con todo lo que vemos. Y es que no hace falta comprar nada más para manejarnos, ya que la interacción va a ser natural. Todos los gestos que hasta ahora hacíamos en el Mac, el iPhone y el iPad, ahora los vamos a hacer delante de nosotros.
Tampoco vamos a necesitar colocar sensores en ninguna habitación, ni vamos a tener espacios delimitados para interactuar y, mucho menos, vamos a depender de un equipo conectado que lleve a cabo las tareas de computación.
Metaverso, ¿dónde estás, que no te veo?
La palabra Metaverso resonó con demasiada fuerza durante 2021 y 2022. La idea de crear un universo paralelo en el que pasar tiempo, a través de unas gafas de realidad virtual y creando un nuevo entorno fue un globo que se fue hinchando, hasta que fue cayendo poco a poco. Y Apple parece que ha dado una estocada final a esta filosofía.
La filosofía de aprovechar la realidad tangible como soporte de las capacidades digitales expandidas contrarresta por completo con el pensamiento de compañías como Meta. El concepto del Metaverso, en las Visión Pro, no está y todo indica que ni se le espera. Porque estas gafas son un ordenador espacial que, como ya se pudo ver en la presentación, se sirve de nuestro espacio para funcionar, sin querer ocuparlo de forma tangible o sustituirlo.