Si estás valorando suscribirte a la versión de Final Cut Pro para iPad, tienes que pararte a pensar que, en el caso de que vayas a comprar un iPad para ello, el almacenamiento SSD no se puede ampliar posteriormente por lo que, vamos a tener que estar utilizando constantemente discos duros externos o estar suscrito al plan de almacenamiento de iCloud. Por ello, en este artículo vamos a ver como elegir la cantidad de almacenamiento correcto para tu iPad si tienes en mente utilizar Final Cut Pro X.
¿Cuánto almacenamiento es necesario en tu iPad?
Antes de adentrarse en la memoria de almacenamiento necesaria para trabajar de forma fluida en tu iPad, es importante recordar que los iPad que tienen acceso a Final Cut Pro son las unidades que incorporan el procesador Apple Silicon de primera y segunda generación, es decir, el iPad Air de quinta generación y las dos últimas versiones del iPad Pro.
El iPad Air cuenta con un almacenamiento inicial de 64 GB, una capacidad de almacenamiento ínfima si quieres explotar las bondades de este software profesional de Apple. No obstante, la versión de entrada del iPad Pro tampoco es mucho más amplia, ya que, parte con un total de 128 GB, una capacidad también bastante pequeña, de manera que, en el momento que tengas un proyecto grande y varias aplicaciones instaladas como Pixelmator, Figma o la suite de Adobe, vas a tener problemas de espacios muy graves, que te obligarán a estar constantemente utilizando la nube de iCloud de Apple o un disco duro externo SSD.
El almacenamiento ideal: ¿256 GB o 512 GB?
Cuando vamos a comprar un iPad o un producto de Apple, tenemos que pensar siempre a largo plazo, ya que, son dispositivos que van a estar con nosotros 5-6 años perfectamente con un rendimiento excepcional. Por tanto, la capacidad que tú crees que te puede venir bien ahora, en poco tiempo puede ser insuficiente.
Bajo esta premisa, la opción de 256 GB podría ser recomendable para usuarios semiprofesionales y que no van a dar un salto de calidad en su edición. Esta memoria es la que ofrece Apple en sus Mac de entrada, y te permite tener instalada multitud de programas complejos como DaVinci Resolve, Affinity Photo o toda la suite de Adobe.
Eso sí, si vas a sacar alguna formación profesional, universitaria o tienes previsto aumentar tu flujo de trabajo en el ámbito de la edición de vídeo, la opción de 256 GB quizás se puede quedar corta a largo plazo.
Por tanto, la opción de 512 GB de almacenamiento interno podría ser la opción idónea para muchos usuarios, sobre todo, para aquellos utilizan la suscripción de Final Cut Pro en iPad de forma profesional y van a buscar una perfecta sintonía entre el Mac y el iPad, y que buscan trabajar en movilidad y eso significa no tener que llevar demasiado accesorios externos.
La elección final
Las versiones de almacenamiento de entrada en el iPad Air e iPad Pro son insuficiente para la mayoría de los usuarios, por lo que, vamos a tener que añadir un importe extra a la compra del producto más allá de los accesorios como el teclado y el Apple Pencil.
Por tanto, la opción más recomendable, independientemente de la versión que utilices, es 512 GB, una memoria estándar que se queda por encima de los 256 GB, una cantidad justa para muchos usuarios y por debajo de 1 TB, un almacenamiento, quizás excesivo y que la mayoría de los usuarios no van a ocupar, lo que pueden destinar esos recursos a adquirir mayor memoria RAM en la versión Pro.