El Mac Mini es por diseño y características técnicas, un equipo perfecto para situar en localizaciones imposibles y convertir un ordenador en algo más: un servidor improvisado para casa, un centro de copias de seguridad para varios ordenadores, un media center o incluso como equipo para usar con pantallas publicitarias. Sin embargo, puede dañarse con golpes o arañazos fácilmente, por lo que es recomendable ponerle un soporte, y en este post te contamos algunos de los motivos.
Muchos de estos usos requieren de un equipo versátil en diseño y que se pueda esconder fácilmente y el Mac Mini es perfecto para ello pero además podemos añadir algunos de estos soportes para esconderlo aún más o mostrarlo de una forma mucho más bonita.
Al tratarse de un ordenador tan pequeño, es bastante probable que lo pongas en cualquier lado, cerca de la pantalla, pero sin mucha preocupación. Sin embargo, si quieres conservarlo lo mejor posible por fuera, sin golpes ni roces, es conveniente que le pongas un soporte. Con el soporte estará más elevado, por lo que el riesgo de que se lleve algún golpe mientras escribes es menor. Hay otro tipo de soportes que permiten que tu Mac mini ocupe aun menos espacio y puedas situarlo justo detrás de la pantalla o en alguna estantería. Debido al reducido tamaño del Mac mini es posible montarlo en la parte trasera de los monitores. De este modo lo escondemos detrás del monitor o lo colocamos en una pared cercana para aliviar la carga de espacio en el escritorio.
Por esto debes ponerle un soporte
Una de las razones principales por las que debes poner un soporte a tu Mac mini es es que tiene todos los puertos en la parte trasera, y cada vez son más las marcas que hacen soportes que incluyen puertos en la parte delantera. Gracias a esto te será mucho más fácil conectar periféricos, auriculares o lo que necesites para utilizar el ordenador de la compañía de California.
El Mac mini tiene un bonito acabado y un diseño llamativo, pero como está fabricado en aluminio es fácil que se arañe. Gracias a las fundas de silicona, podrás protegerlo de suciedad, arañazos y posibles impactos. Además, al estar hecha de silicona, encaja perfectamente con tu ordenador y es lavable, por lo que si se ensucia demasiado, podrás limpiarla sin que se rompa. Este tipo de fundas son otra buena forma de poder proteger tu equipo sin riesgos y sin gastar una gran cantidad de dinero.
Por último, otra de las opciones disponibles para que tu Mac mini no sufra rasguños es poner una funda de tela, estilo sobre. Su precio es bastante bajo por lo que es accesible para todo el mundo. Pero este tipo de fundas no son tan resistentes como las de silicona o como los soportes que hacen que el Mac esté escondido. Como has podido comprobar, son varias las opciones que tienes disponibles para que tu Mac mini esté impoluto sin rasguños ni golpes, y es que tendrás que tener cuidado con este pequeño dispositivo para que no se caiga ni se lleve golpes.