Apple necesita estandarizar los puertos de sus dispositivos (para bien de sus usuarios)
Apple hizo un maniobra bastante arriesgada (y a la vez interesante) al lanzar el MacBook de 12” con un único puerto USB-C. Siguiendo esta propia estela, los MacBook Pro de 2016 hicieron lo propio pero con un conector Thunderbolt 3 (USB-C).
En cambio, los dispositivos iOS conservan el ya conocido Lightning, capaz de transferir audio, datos y la posibilidad de cargar sus dispositivos. Apple estuvo desarrollando este tipo de entrada con vistas hacia un futuro que ya ha llegado, concretamente con la eliminación de conector de audio analógico (jack audio) del iPhone 7 y posteriores.
Cada uno de estos puertos tiene sus ventajas y desventajas, pero a nivel de un usuario de Apple, claramente es una gran desventaja por la propia maniobra de los californianos. A no ser que invirtamos en adaptadores.
Sí, adaptadores o cables específicos (que se venden a parte), el nombre del dinero extra que debemos desembolsar si queremos hacer algo tan sencillo como cargar la batería de nuestro iPhone con un MacBook Pro de última generación.
La teoría de Apple es buena, pero se aplicó a medias
Todos recordamos el momento el que se puso a la venta el MacBook Pro (2016) con un puerto único Thunderbolt 3 con capacidad de conectar dispositivos con entrada USB-C. La idea era tener un conector universal que sirva para todo, minimizando los adaptadores y mejorando la transferencia de datos.
A pesar de que fue una respuesta sin una transición previa, algunos usuarios “compramos esa idea”, sinceramente, es fantástica. Eliminar todos los cables micro USB, mini USB, Lightning, Ethernet, VGA, HDMI… Y concentrarlo en un único puerto y cable. Sinceramente, una gran idea.
Por supuesto, la industria también debería apostar por ello (y lo está haciendo a buen ritmo con el USB-C). A nivel de cliente de Apple, resultaría más práctico usar un adaptador para esos dispositivos específicos que lo necesiten y no al contrario, como ocurre actualmente con el iPad Pro.
Es curioso como una empresa de esta envergadura apueste todo al rojo de la ruleta pero a la vez ponga la mano para recibir más fichas de parte de los asistentes del casino. Es decir, lanzar un puerto único a vista de presente y futuro pero mientras el modelo a seguir es utilizar adaptadores. Un mercado bastante suculento del cual Apple tiene el monopolio gracias a sus certificados, los famosos MFI.
No, si hay una respuesta tan arriesgada como esta, vayamos todos al rojo y confiemos en que todo saldrá bien, pero no a medias. Ya que no ofrece seguridad y garantías para el usuario ni para los fabricantes implicadas en desarrollar dispositivos y accesorios compatibles.
Accesorios, la moneda de ingresos extras
Actualmente puedes comprar el MacBook Pro más caro de la Apple Store, pero no podrás cargar tu iPhone o iPad a través de sus puertos, a no ser que pases por caja. Ya sabemos que Apple no es una ONG, así que es entendible a nivel de beneficios de empresa, pero los daños colaterales recaen en los propios clientes.
Comprar accesorios no es el peor escenario que te puedas encontrar al realizar la inversión (por ejemplo) de un MacBook Pro, el peor es tener que viajar con accesorios adicionales para algo tan simple como cargar tu propio smartphone en un equipo de la misma marca o hacer una restauración del iPhone o iPad en caso de necesitarlo.
Apple es la única empresa que no permite conectar sus propios dispositivos entre sí a no ser que uses adaptadores y accesorios certificados. Actualmente podemos encontrar en la Apple Store unos 40 accesorios y adaptadores para conectar diferentes tipos de entradas.
La parte positiva es que cualquier equipo más longevo tiene su oportunidad de seguir conectando diferentes equipos electrónicos. Pero a vista de utilidad, lo ideal sería reducir este número de accesorios de cara al usuario para no tener que depender de ellos.
Accesorios para todo en un mundo ideal sin cables.
Apple ha manifestado que quiere un mundo sin cables en varias ocasiones. Lo hemos podido comprobar con la carga por inducción de terceros, ya que AirPower fue anunciada hace un año y no ha sido puesta la venta (sea por el motivo que sea). Con lo cual, estamos ante una buena idea, pero sólo es eso, una idea y no una solución para el propio cliente.
Toda la teoría se reduce a utilizar accesorios y a la vez se amplia en tener que viajar con una mochila o un pequeño bolso para todos ellos. Es inviable viajar con un iPad Pro o un MacBook sin los adaptadores para conectar los accesorios necesarios para realizar el trabajo particular de un usuario concreto.
Las empresas dieron la espalda a Apple con el conector propietario
Con el lanzamiento del conector propietario de 30 pines, muchos fabricantes decidieron lanzar dispositivos exclusivos para iPod y iPhone, como altavoces o sistemas de audio para los vehículos.
Con la llegada el conector Lightning de 8 pines, los fabricantes y grandes almacenes vieron como estos productos comenzaban a llenarse de polvo, teniendo serios problemas a la hora de venderlos, incluso como liquidaciones.
Los fabricantes aprendieron una gran lección, también los consumidores, donde la conexión Bluetooth (y actualmente WiFi en menor medida), fue una solución para no caer en el mismo error. Actualmente es muy difícil encontrar un equipo de audio con un conector propietario de Apple.
El micro USB ganó la partida, pero está cayendo en el olvido sobre las nuevas apuestas, ahora el camino de las grandes marcas está cursando hacia el puerto USB-C gracias a las ventajas que este ofrece.
Apple lo sabe y es por ello que apuesta por una entrada como Thunderbolt 3 en los MacBook Pro, ya que ofrece un gran volumen de transferencia muy superior de datos (hasta 40 GB/s), audio y vídeo. Además también es compatible con USB-C, el estándar venidero a corto plazo.
Pero hasta el momento, tenemos que seguir conformándonos con accesorios para realizar algo tan simple como restaurar nuestro iPhone a través de los nuevos MacBook Pro.
La UE lo intentó, ahora forzará a los fabricantes, incluído Apple
La Unión Europea quiso poner fin al gran número de cargadores que existían en el mercado con una tímida proposición. En 2014 animó a los fabricantes (por tercera vez) a usar un estándar para que los usuarios tuvieran un cargador universal. Esta medida no tuvo mucha (por no decir nula) repercusión entre los fabricantes.
El modelo micro USB se estandarizó rápidamente, exceptuando a Apple, que se las ingeninió para contentar (a medias) a la UE con un adaptador Lightning a micro USB que seguramente será desconocido para la mayoría de los usuarios. Cuatro años después, el micro USB se está quedando obsoleto para los nuevos terminales, abrazando el USB-C como el nuevo estándar universal. En el caso de Apple, podría ser Thunderbolt 3 (USB-C).
Ahora, en 2018, la Comisión Europea estudia forzar a los fabricantes para que apliquen esta medida en un plazo de 24 meses. Un plazo razonable para que los fabricantes puedan adoptar el nuevo cargador universal.
Aunque es cierto que todavía no es una medida oficial ratificada, ya que se encuentra en una fase inicial que todavía no ha sido presentada a votación. Pero todo apunta a que podría ser un nuevo intento con más fuerza de peso para que los fabricantes opten por un nuevo cargador universal, como ya ocurrió con los ordenadores portátiles.
Los nuevos iPad y los futuros iPhone, podrían incorporar USB-C o Thunderbolt 3 en 2020 como máximo, fecha en la que la UE podría comenzar a forzar a los fabricantes para que utilicen un nuevo estándar en la industria. Aunque según los rumores y el propio código de iOS 12, Apple podría adelantarse a esa fecha.
Los rumores hablan de un conector USB-C
Aunque esta transición está siendo lenta, los rumores apuntan que pronto (muy pronto), comenzaremos a ver nuevos iPad y iPhone con una entrada diferente al Lightning, posiblemente USB-C.
Gracias a esto, el manojo de cables del cajón podrá desaparecer de una vez por todas. No tener que estar pensando en un viaje si llevamos con nosotros el accesorio de tal dispositivo o el cable de carga de cada uno de ellos, con sólo llevar uno universal, será mas que suficiente para cubrir nuestras necesidades.
Por supuesto, la industria también debería adaptarse (ya lo están haciendo en el estándar USB-C), pero a nivel de usuario de Apple, la propia marca debe ofrecer una solución al cliente sin tener que pasar por la Apple Store, tanto a los particulares como a los profesionales de los diferentes sectores.
Sin duda, el USB-C será un estándar dentro de poco, Apple podría ir un poco más allá con el Thunderbolt 3, ya que también es compatible con el USB-C y ofrece mejores características. Pero mientras tanto, tendremos que seguir viviendo con accesorios y adaptadores para realizar ciertas acciones.