La pregunta que todo usuario se hace al elegir entre los distintos modelos de un iPhone. ¿Voy a por el Pro, o me llega con el básico? La característica más importante que los diferencia es su pantalla, la frecuencia de la misma, pero, ¿se nota tanto?
Mientras que los modelos Pro cuentan con 120 Hz, los básicos se mantienen en 60 Hz, una frecuencia que para muchos es ridícula en pleno 2024, y por la cual no se atreven a adquirirlos. Así que hoy vamos a comprobar si realmente es para tanto.
¿60 Hz son suficientes?
Son varios ya los años en los que Apple apuesta por esa diferencia clave entre un modelo y otro, que, junto a las cámaras, es lo más diferenciador entre ellos, pero, ¿se nota? Pues bien, es complicado visualizarlo a través de videos, sin embargo, vamos a intentarlo.
De todas formas, después de ver el siguiente ejemplo, os daré mi opinión personal, después de estar manejando ambos durante mucho tiempo, ya que, no te das cuenta de algo hasta que no pruebas otro mejor, ya que toda la vida hemos tenido 60 Hz como máximo y nunca nos parecieron pocos.
En el video se puede apreciar como el iPhone Pro, de 120 Hz, apenas muestra tirones, mientras que en los 60 Hz vemos los saltos de imágenes, sin embargo, esto es a cámara muy lenta, algo que el ojo no aprecia tanto en tiempo real.
Y yo, ¿con cuál me quedo?
Pues bien, esto es cuestión de gustos, ya que habrá gente que le dé más importancia a la batería, otros a las cámaras y otros a la pantalla. Sin embargo, siendo neutrales, la pantalla de un iPhone normal a 60 Hz se ve perfectamente, no existen esos tirones que apreciamos en el video, y no es motivo para no elegirlo. Ahora bien, por la diferencia de precio, sobre todo en algunos modelos como el 13, yo no me quedaría con 60 Hz.
Los 120 Hz de los Pro, se notan, y mucho, cuando los pruebas. Si coges un teléfono cada semana no te darás cuenta, pero si estás trabajando con ambos a la vez, como me pasa a mí, en cuanto dejas el Pro y coges el normal, piensas que estás 20 años atrás.
Es decir, ¿me quedaría un iPhone de 60 Hz? Sí, pero siempre que tenga opción a 120 Hz por un precio poco mayor, lo escogeré, me parece que se nota, y mucho, aunque separados no lo notes tanto. La experiencia es muy diferente. Y es que, ¿quién no jugó a la PlayStation 2? Ponte un juego ahora, pensarás que está estropeada, ya que los gráficos, por aquel entonces, nos parecían buenísimos, sin embargo, ahora, ridículos. Pues es algo parecido.
No confundir los Hz con los nits
Hemos visto la importancia que tienen los Hz con los dispositivos móviles. Sin embargo, es importante no confundirlos con los nits, ya que tienen una finalidad completamente diferente.
Los Hz nos permiten visualizar el contenido sin generar pesadez visual, mientras que los nits, según indica el Sistema Internacional de Unidades, son la unidad utilizada para referenciar la luminosidad de un foco. Por tanto, a mayor cantidad de nits, mayor capacidad de visualizar el contenido de nuestros dispositivos móviles en ambientes con mucha luz, como cuando vamos por la calle.
En este sentido, si tienes un dispositivo con 300 nits, una cantidad baja, se verá en ambientes con poca incidencia, como puede ser tu casa o en el metro, pero en la calle no podrás ver nada. En cambio, si escogemos un dispositivo de 1.000 nits, podremos ver toda la información sin necesidad de forzar la vista. Por ejemplo, los iPhone 15 Pro ofrecen 1.000 nits de brillo tópico y 2.000 nits de brillo máximo. Los Apple Watch Series 9 también alcanzan los 1.000 nits de brillo, y los iPhone 15 pueden alcanzar los 2.000 nits.
En definitiva, un iPhone de 90 Hz marcase la diferencia, y entonces ya no te diría que vayas a por otro mejor, puede que le falte eso, un poco más, sin llegar a 120 Hz, que puede ser excesivo, pero, al menos, a día de hoy, 60 Hz se quedan cortos, y yo, siempre que pueda iré a por más, ya que, en resumen, sí, se nota.