El Apple Watch es un dispositivo realmente útil, que una vez lo incorporas en tu día a día se vuelve prácticamente imprescindible. Por ello, en este post te quiero contar las razones o, mejor dicho, lo que realmente me aporta este equipo para que pase lo que pase, cada día siga pegado a mi muñeca, y así llevo ya más de 5 años. Sigue leyendo que te lo cuento todo.
Lo primero que tengo que decir es que soy usuario del Apple Watch desde la primera versión, y es cierto que al principio, antes de adquirirlo, me costó verle la utilidad práctica, sobre todo para invertir la cantidad de dinero que cuesta este producto. Sin embargo, una vez lo incorporas en el día a día te das cuenta de lo mucho que aporta, sobre todo con el paso de las versiones y diferentes novedades que han ido llegado a un producto que, hoy en día, está completamente asentado y es referencia en su sector.
Las dos razones por las que adoro el Apple Watch
Tras tantos años de experiencia usando el Apple Watch, actualmente tengo el Series 7, hay dos aspectos que personalmente destaco, ya que al final es para lo que más utilizo este dispositivo. El primero de ellos es la gestión de notificaciones, y es que al final esta es una de las características estrella del producto, te permite tanto estar más pendiente de las mismas, ya que te llegan a tu muñeca, como también, gestionarlas mejor, es decir, tener la oportunidad de realmente decidir si sacas el iPhone para responder a esta notificación o si por el contrario, eso que tienes que hacer o decir puede esperar unos minutos. Por no hablar de lo cómodo que es poder responder llamadas o incluso hacerlas desde la muñeca.
Ahora bien, el motivo principal por el que uso cada día el Apple Watch es por como es capaz de medir toda la actividad física que realizo. Y ojo, no me refiero únicamente a los entrenamientos que llevo a cabo, sino a toda la actividad del día. El Apple Watch es un dispositivo que incita a las personas a ser más activas, a moverse, gracias a los diferentes anillos que puedes personalizar en función tus gustos y necesidades, y que, utilizados de una forma correcta, te pueden marcar la diferencia a la hora de llevar una vida más o menos sedentaria, y eso para mi es clave, ya que me motiva a dar ese extra de movimiento cuando tengo un día demasiado pasivo.
Otras funciones muy útiles
Obviamente, el Apple Watch no solo destaca por los dos aspectos mencionados, sino que también aporta otras muchas funciones que te hacen el día a día más fácil. La gran cantidad de sensores que tiene te aporta una información a nivel de salud que es tremenda, llegando incluso a salvar la vida de muchas personas que han sido avisadas por el propio reloj de que algo no iba del todo bien.
Con él puedes medirte la frecuencia cardiaca, hacerte electrocardiogramas, comprobar la cantidad de oxígeno en sangre e incluso, con el Series 8 o posteriores, conocer la variación de tu temperatura corporal, por no hablar de la detección de caídas y accidentes, otras dos funciones que ya han salvado la vida de varios usuarios. En definitiva, el Apple Watch es un producto que te gana desde el primer día, y ojo, del cual es difícil desprenderte una vez comienzas a sacarle partido, yo al menos no pienso hacerlo.