Apple ha decidido dar un golpe sobre la mesa muy pronto y no lo harán con un nuevo iPhone, sino con un producto que llevan años desarrollando y que, casualmente, está muy de moda gracias a Meta y Ray-Ban. Sí, se trata de unas gafas inteligentes y la compañía de Cupertino las lanzaría el año que viene, en 2026.
Al menos esto es lo que nos dice un nuevo informe de Bloomberg, firmado por el reputado Mark Gurman, afirmando que la compañía de Cupertino trabaja a toda máquina en un nuevo dispositivo que promete ser la próxima gran revolución en tecnología wearable: unas gafas inteligentes alimentadas por Apple Intelligence, con un diseño mejor que el de las Ray-Ban Meta y una integración más profunda con sus propios servicios.
Si alguien pensaba que Apple había llegado tarde a la inteligencia artificial o a la realidad aumentada, es posible que haya que replantearse esa idea.
Gafas de Apple: fecha y características
Estas gafas, que llegarían en la segunda mitad de 2026, tendrían funciones similares a las gafas de Meta desarrolladas junto a Ray-Ban, como hacer fotos, grabar vídeo, recibir instrucciones, reproducir música, responder llamadas o realizar traducciones en tiempo real. Pero, según el informe, Apple quiere ir más allá y ofrecer un producto mejor construido y, sobre todo, mucho más pulido en cuanto a experiencia de usuario. Quieren ofrecer un dispositivo con un aspecto cotidiano que no destaque en exceso pero cargado de tecnología, con una interfaz discreta, sin pantallas, y capaz de convertirse en una especie de asistente con IA.
Por ahora, el dispositivo no apostará por una experiencia de realidad aumentada completa como las Apple Vision Pro, sino que optará por ofrecer utilidades concretas y bien pensadas, apoyadas en el audio espacial, la inteligencia visual de iOS 18.2 y, probablemente, una versión mejorada de Siri. Eso sí, Gurman advierte de que dentro de Apple hay cierto escepticismo sobre el progreso real en el desarrollo de su IA, ya que muchas funciones actuales aún dependen de ChatGPT, algo que podría comprometer la independencia tecnológica que la empresa siempre ha perseguido.
Este movimiento llega en un momento en que la competencia se está intensificando. Sin ir más lejos, OpenAI acaba de anunciar la compra de una startup creada por Jony Ive (diseñador del iPhone y MacBook Pro) para crear nuevos dispositivos basados en inteligencia artificial, lo que algunos interpretan como un guiño directo a Apple. Por su parte, Google también ha confirmado que trabaja en unas gafas con Gemini, su propia IA generativa. La carrera por dominar este nuevo formato wearable está en marcha, y Apple no quiere quedarse atrás.
La filtración de estas gafas pone el foco sobre un nuevo tipo de dispositivo que podría cambiar dar una vuelta de tuerca a lo que entendemos por tecnología, con menos pantallas, una interpretación mayor del contexto, la IA como asistente y una integración profunda con el mundo real. Si Apple logra superar los retos técnicos y de software que tiene por delante, podríamos estar ante el próximo gran éxito de la compañía. Uno que no llevarás en el bolsillo, sino en la cara.