El Magic Mouse es un dispositivo que ha conquistado a muchos usuarios gracias a su comodidad y portabilidad. Aunque la segunda generación corrigió varios de los problemas presentes en la primera, sigue sin ser un producto completamente libre de fallos. A lo largo de su vida útil, este accesorio puede experimentar diversos inconvenientes, y en este artículo analizaremos los más comunes y te ofreceremos posibles soluciones.
Este icónico ratón de Apple se destaca frente a sus competidores por integrar funciones avanzadas como el trackpad, tener una latencia muy baja y contar con un diseño ergonómico. Además, su batería, tanto en la versión original como en la versión más reciente, parece casi interminable, lo que lo convierte en una excelente opción para los usuarios de macOS, siendo el complemento ideal para cualquier ordenador de Apple.
Sin embargo, no está exento de problemas. A continuación, te mostraremos cuáles son los fallos más frecuentes del Magic Mouse y cómo puedes resolverlos. ¡Sigue leyendo!
Comprueba estos errores en el ratón de Apple
Este error varía según el modelo de Magic Mouse que tengas. El modelo más antiguo funciona con pilas, mientras que la versión más reciente tiene una batería recargable integrada.
Si posees un Magic Mouse de primera generación y experimentas problemas relacionados con las pilas, lo primero que deberías intentar es reemplazarlas. Si el problema persiste, es posible que el mecanismo que mantiene las pilas en su lugar esté desgastado, lo que podría impedir un contacto adecuado. Como resultado, el ratón podría desconectarse y reconectarse de manera intermitente.
Si tienes un Magic Mouse de primera generación, una posible solución es colocar un trozo de papel de aluminio en forma rectangular entre las dos pilas para evitar que se muevan. Esto elimina el espacio libre entre ellas y asegura un mejor contacto, evitando desconexiones. No debes preocuparte por interferencias, ya que el papel de aluminio no generará problemas en ese sentido.
En el caso de la segunda generación, que funciona con una batería recargable, el desgaste de las baterías de litio puede ser una causa común de fallos. Con el tiempo, la batería puede perder capacidad, provocando desconexiones intermitentes o una descarga mucho más rápida de lo habitual. La única solución definitiva es llevar el ratón a una Apple Store para que evalúen el estado de la batería y, si es necesario, la reemplacen.
Puedes detectar este problema revisando el nivel de carga en las preferencias del sistema. Si la batería, que normalmente dura un mes, se descarga en pocos días, es un signo claro de degradación. Para prevenir este desgaste prematuro, se recomienda recargar el ratón con frecuencia y siempre usar cargadores compatibles para asegurar una potencia adecuada, evitando así el consumo innecesario de ciclos de carga.
Problemas de encendido en el Magic Mouse
Aunque puede parecer evidente, a veces el problema es simplemente que el ratón está apagado sin que te des cuenta. Para verificar que está encendido, desliza el interruptor en la parte posterior del dispositivo y observa el LED en la parte frontal. En el Magic Mouse de primera generación, este LED se enciende brevemente en verde antes de apagarse. Si el LED no se ilumina, es posible que el ratón esté sin batería, por lo que deberás seguir los consejos mencionados anteriormente. Si después de esto el problema persiste, lo mejor es contactar con el servicio técnico de Apple.
En el caso del Magic Mouse de segunda generación, al deslizar el interruptor en la parte inferior, aparecerá una zona de color verde que indica que el dispositivo está encendido. A diferencia del modelo anterior, este no utiliza un LED, sino una simple marca visual para confirmar el encendido. Si el ratón tiene carga completa y no se vincula automáticamente al encenderlo, puede haber un problema de hardware. En ese caso, lo más recomendable es acudir a un técnico especializado para determinar si hay daños que estén impidiendo su correcto funcionamiento.
El Mac no detecta el ratón
¿Tu ordenador no detecta el Magic Mouse y no consigue conectarse? Este es un problema común que puede tener diversas causas.
El primer paso es verificar si el Bluetooth de tu ordenador está activado correctamente. Para hacerlo, ve a Preferencias del Sistema > Bluetooth y asegúrate de que la opción esté encendida. Debería aparecer un ícono de Bluetooth en la barra superior del ordenador, lo que confirma que la conectividad está habilitada.
Si a pesar de esto el Magic Mouse sigue sin ser detectado, intenta apagar el ratón durante unos minutos y luego encenderlo nuevamente. Después, vuelve a la ventana de configuración de Bluetooth para comprobar si el dispositivo aparece en la lista.
Otra solución que puedes probar es desenlazar todos los accesorios conectados al ordenador. Además, si habías utilizado el Magic Mouse con otro dispositivo, como un iPad u otro ordenador, te recomendamos desconectarlo de ese equipo, ya que podría estar interfiriendo con la conexión en tu ordenador actual.
Si nada de lo anterior ha funcionado, intenta conectar el ratón al ordenador usando un cable Lightning. Con solo conectarlo durante aproximadamente un minuto y luego desconectarlo, el accesorio debería enlazarse automáticamente con tu ordenador, además de recargar la batería integrada al mismo tiempo.
El puntero del Magic Mouse no se mueve
Otro de los grandes problemas que te vas a encontrar con el Magic Mouse está relacionado directamente con el puntero del ratón. Y es que puede darse la circunstancia de que este no se mueva como tú deseas, o que ni siquiera te permita acceder a las aplicaciones que necesitas. Esto se puede deber, en buena medida, a la superficie en la que se encuentre el ratón.
La mayoría de ratones funcionan en la mayoría de superficies planas, pero hay algunas que, como el cristal, pueden dar malos resultados. Para poder solucionarlo, lo ideal es probar con una superficie diferente para observar si mejora o no. Te recomendamos apostar por una alfombrilla para el ratón, puesto que te hará la experiencia mucho más cómoda.
También puedes inspeccionar el sensor que encontrarás en la parte trasera. Puede que encuentres en este alguna mota de polvo que provoque que el láser no pase correctamente.
Si no se soluciona el problema, puedes revisar las dos capas de goma que el ratón tiene en la parte inferior. Estas generan una especia entre el sensor de movimiento y la superficie en la que se localiza. Debido al roce constante, puede haberse ensuciado, provocando así una peor respuesta del ratón. Tan sencillo como limpiarla para ver si se soluciona.
Si nada de esto funciona, dirígete a Preferencias del Sistema > Ratón. Encontrarás un regulador que te permitirá ajustar la velocidad de movimiento a tu gusto. Auméntala y vuelve a provocar el movimiento del ratón sobre una superficie plana, para ver si responde mejor o no.
Error en un botón del Magic Mouse
Los botones son vitales para que el ratón funcione correctamente. En este caso, uno de los fallos más comunes que se pueden presentar es que el botón no se deslice. Esto se traduce principalmente en que no se va a poder hacer la pulsación, ya que el botón va a encontrar algún impedimento que evitará que se produzca. Concretamente, ante estos casos lo que hay que evitar en todo momento es la acumulación de polvo en las rendijas de los propios botones. Esto sobre todo es importante cuando se está en una habitación donde tienes la ventana abierta constantemente y en la que pueden entrar numerosos ácaros.
Ante esta situaciónm la clave es la limpieza. Como habrás podido comprobar, los botones del ratón de Apple no se pueden desmontar. Te puedes ayudar de un dispositivo de aire a presión para poder disipar todos los residuos. En el caso de que el problema no sea el polvo, sino un residuo más pegajoso o gelatinoso, es posible que debas usar algún trapo humedecido.
Botón derecho del ratón desconfigurado
El botón derecho del Magic Mouse suele ser utilizado para funciones secundarias como “Atrás”, “Guardar” y “Copiar”. Si este botón deja de funcionar correctamente, puede resultar un problema significativo en tu rutina diaria.
Para intentar solucionar este problema, primero desactiva la función del clic derecho en Ajustes del Sistema. Luego, reinicia el Mac y vuelve a habilitar la función en la misma pestaña. Esto a menudo resuelve el problema. Si el botón sigue sin funcionar, puedes intentar restablecer el SMC (System Management Controller) de tu ordenador, que gestiona la energía del Mac.
Si no te sientes cómodo realizando estos pasos o el problema persiste, lo más recomendable es llevar el Magic Mouse a un servicio técnico para recibir asistencia profesional.
El Magic Mouse va lento o se desconecta
Las interferencias pueden afectar negativamente el rendimiento de los ratones inalámbricos. Las redes que operan a 2,4 GHz, como las de los routers, microondas y bases de teléfonos inalámbricos, pueden causar interferencias. Por lo tanto, es recomendable mantener el Mac y el ratón alejados de estos dispositivos, así como de objetos metálicos, y asegurar que estén a una distancia máxima de 10 metros entre sí.
Puedes identificar interferencias si el ratón responde de manera intermitente o con retraso. Además, otros dispositivos cercanos, como altavoces, también pueden experimentar problemas de funcionamiento debido a las interferencias. Aunque es raro, esto puede ocurrir.
Configurar el Magic Mouse en Mac
Cuando detectamos que el funcionamiento en nuestro Magic Mouse no es el que debería, podemos realizar una serie de comprobaciones desde los Ajustes de nuestro Mac. Todos los modelos de Mac cuentan con opciones específicas que nos van a aparecer en Ajustes del Sistema cuando el equipo detecte que tenemos un Magic Mouse vinculado. Así pues, podremos revisar qué es lo que falla, así como ajustar configuraciones que no suelen venir activadas, por defecto, la primera vez que vinculamos ambos dispositivos.
Si vamos a Ajustes del Sistema > Mouse, veremos dos categorías de opciones que podemos modificar. La primera de ellas agrupa los gestos básicos que podemos realizar con el Magic Mouse, ya sea con los botones físicos, o bien, con la superficie táctil. La segunda categoría de opciones agrupa gestos avanzados que podemos hacer con el ratón, aprovechando las capacidades táctiles del dispositivo. Estas opciones son:
- La velocidad del cursor
- Desplazamiento natural: esta opción permite que el movimiento de nuestro dedo sobre el panel táctil se vea reflejado en la misma dirección en la pantalla. Es especialmente útil cuando navegamos entre contenidos, ya sea de forma vertical u horizontal.
- Establecer un clic secundario: esta opción suele venir desactivada por defecto, y tendrás que configurarla en este apartado.
- Zoom inteligente: esta opción permite realizar pulsaciones sobre la superficie táctil del ratón (sin tener que hacer la pulsación completa de uno de los dos botones), para ampliar o reducir contenidos en ventana.
- Pasar de página: si realizas el mismo gesto que sueles usar en el iPhone o iPad a la hora de pasar de página en tu Magic Mouse, este también lo detectará.
- Cambiar entre aplicaciones a pantalla completa: cuando maximizamos una ventana, utilizamos el modo Split View o tenemos más de un escritorio abierto, podemos cambiar entre estos elementos.
- Mission Control: esta funcionalidad de Mac permite per un resumen de las aplicaciones, agrupadas por ventanas y escritorios.
Acudir al servicio técnico
Si tu Magic Mouse presenta problemas físicos, como un botón que no funciona o la batería que no carga, será difícil solucionarlo por ti mismo. En estos casos, lo más recomendable es acudir al servicio técnico, ya que el dispositivo está cubierto por una garantía. Si el problema se debe a un defecto de fabricación, Apple podría reemplazar el ratón sin coste alguno, siempre y cuando esté dentro del período de garantía y presentes la factura correspondiente.
Es importante no intentar reparar el Magic Mouse por cuenta propia, ya que podrías perder tanto la garantía del ratón como la del iMac si es un accesorio original. Aunque existen guías para hacerlo, no es recomendable a menos que tengas los conocimientos adecuados.
Puedes intentar reparar el Magic Mouse en servicios no autorizados, dado que su coste es menor en comparación con dispositivos como el iPhone o el Mac. Sin embargo, ten en cuenta que al optar por esta vía, perderás la garantía del dispositivo y no tendrás la seguridad de que la reparación sea completamente efectiva o que el ratón funcione como antes.
La opción de reparar el ratón por cuenta propia no es recomendada a menos que tengas experiencia y los materiales adecuados. Abrir el dispositivo anulará la garantía y es posible que no consigas una batería original, ya que solo Apple y los centros de servicio autorizados garantizan la autenticidad de sus piezas. Si prefieres una opción menos arriesgada, la reparación en un taller especializado podría ser más segura y económica. Si la reparación no es viable, puedes considerar comprar otro Magic Mouse a un buen precio o con descuento.
Déjanos en los comentarios si alguna vez tenido problemas graves con la batería de tu iPhone y cual es la solución que te dieron desde la App Store.