Aunque el Mac es conocido por su fiabilidad y rendimiento, no está exento de fallos. Uno de los problemas más comunes, y potencialmente más frustrantes, es el apagado inesperado del equipo, lo que puede derivar en la pérdida de información. A continuación, te explicamos las posibles causas y soluciones.
Este problema puede tener su origen tanto en el hardware como en el software, por lo que conviene evaluar ambas opciones. En ocasiones, incluso pueden coincidir varios fallos a la vez, lo que requiere abordar ambos para que el dispositivo vuelva a funcionar correctamente.
Mac se apaga solo por problemas de hardware
Como es lógico, cuando un equipo electrónico comienza a generar algún tipo de fallo se debe apuntar al hardware de este. Cualquier componente interno, en el caso de presentar un error lo primero que hará es no arrancar correctamente. Y aunque dentro de un Mac se pueden encontrar muchos componentes, como GPU, CPU o RAM, con que uno solo falle se va a generar como problema el no encendido del ordenador. Esto se aplica tanto a un MacBook como al iMac.
Comprueba los accesorios conectados
Aunque solemos centrarnos en los componentes internos de un ordenador, no debemos olvidar la importancia de los periféricos conectados, como el ratón, el teclado o una unidad de almacenamiento externa. Estos dispositivos pueden generar conflictos con el software y provocar que el Mac no se inicie correctamente. Si te enfrentas a esta situación, la solución pasa por desconectar todos los periféricos y realizar pruebas para identificar el problema. A continuación, te detallamos los pasos a seguir:
- Apaga el Mac.
- Desconecta todos los periféricos, como discos duros externos o impresoras. Si usas un Mac de escritorio, asegúrate de que solo queden conectados la pantalla, el teclado y el ratón o trackpad.
- Enciende el Mac.
- Utiliza el Mac durante el tiempo que normalmente tarda en ocurrir el reinicio inesperado o el apagado repentino.
- Si el problema no se repite, apaga el Mac y conecta un periférico a la vez, hasta que identifiques el que provoca el fallo.
Este proceso te permitirá aislar el periférico que está causando el conflicto y resolver el problema de manera efectiva.
Componentes del Mac dan fallos
Cuando el Mac se apaga repentinamente, muchas veces no es un error, sino un sistema de protección. El hardware del equipo tiene un límite de consumo, y si se sobrecarga la CPU, GPU o RAM, el Mac se apagará automáticamente para evitar el sobrecalentamiento y posibles daños al chip. Además de los costes de reparación, este tipo de fallos podrían provocar accidentes que afecten al usuario.
Esto es frecuente cuando se utilizan programas que exigen un alto rendimiento, muy comunes en entornos profesionales. Para monitorear el consumo del sistema, puedes usar el “Monitor de Actividad”, donde verás los procesos y el uso de recursos. Es importante evitar que el consumo llegue al 100%, ya que eso forzaría al sistema a apagarse por seguridad.
Si experimentas “lag” o lentitud, es una señal de que el dispositivo está alcanzando su límite. Como recomendación, siempre asegúrate de que los programas que utilizas sean compatibles con las capacidades de hardware de tu Mac para evitar sobrecargas.
¿Se ha movido la gráfica?
Aunque este problema no se menciona con frecuencia, lo he experimentado en dos de mis ordenadores, por lo que es importante señalarlo. Debido al uso, el movimiento o el calor excesivo del Mac, es posible que la tarjeta gráfica, que está soldada a la placa base, se desplace ligeramente, especialmente si el Mac se utiliza sobre superficies irregulares o no se apoya en una mesa. Este desplazamiento puede causar un mal contacto, provocando apagados repentinos. El Mac puede volver a funcionar al enfriarse, pero si el problema persiste, se apagará nuevamente al poco tiempo de encenderse. Si experimentas estos síntomas, aunque parezca improbable, revisa tu GPU.
Una posible solución consiste en calentar la GPU intencionadamente. Puedes hacerlo abriendo el Mac y utilizando un secador para calentar directamente la gráfica con la esperanza de que los contactos vuelvan a su sitio. Sin embargo, si no tienes experiencia en este tipo de reparaciones, es mejor no intentarlo, ya que podrías empeorar el problema. Si el Mac es antiguo o no tienes otras opciones, podrías probarlo como último recurso.
La RAM del Mac no funciona bien
La memoria RAM es la responsable principal de que los procesos más básicos se estén ejecutando de manera constante para poder tener el funcionamiento correcto del ordenador. En muchos casos, cuando esta funciona correctamente, es bastante común que se tengan reinicios de manera inmediata al encender el Mac. En este caso es indiferente si hablamos de un ordenador portátil o de un ordenador fijo iMac.
Hay que destacar que algunos modelos de ordenadores Mac tienen memoria extraíble (RAM). Si has instalado memoria o un disco duro (o SSD) en tu Mac recientemente, asegúrate de que es compatible y de que la instalación ha sido correcta. Si es posible, elimínalo y haz la prueba con la memoria o el disco original. Y es que la unidad de almacenamiento, aunque puede parecer algo insignificante, hay que destacar que al final es donde está almacenado el sistema operativo que es el responsable de que todos los componentes internos funcionen correctamente.
Realiza un diagnóstico sobre el Mac
En el caso de que se presente algún fallo de hardware en Mac, debes saber que puede salir a la luz a través de una herramienta de diagnóstico que está integrada en macOS. La herramienta Diagnóstico Apple, anteriormente denominado Apple Hardware Test, puede verificar si el Mac presenta problemas de hardware. Es ideal, como hemos comentado anteriormente, si sospechas de algún fallo en el procesador, la gráfica, la RAM o la alimentación. Además, también sugiere soluciones y te ayuda a contactar con Soporte.
Para poder realizar la diagnosis, primero se deberá apagar el Mac y desconectar todos los periféricos. Igualmente, hay que asegurarse de que esté ubicado en una lugar estable. Seguidamente, si tienes un Apple Silicon, vas a tener que seguir los siguientes pasos:
- Enciende el Mac y mantén pulsado el botón de encendido mientras se inicia el ordenador.
- Suelta el botón cuando veas la ventana de opciones de inicio, que incluye un icono de engranaje con la etiqueta Opciones.
- Pulsa la combinación de teclas Comando (⌘)-D en el teclado.
Igualmente, hay que tener en cuenta que en el caso de tener un procesador de Intel, los pasos a seguir son los siguientes:
- Enciende el Mac e inmediatamente mantén pulsada la tecla D del teclado mientras se arranca el ordenador.
- Suéltala cuando veas una barra de progreso o se te pida que selecciones un idioma.
¿Estás trabajando en las condiciones adecuadas?
Hay que tener en cuenta que los Mac son dispositivos que en realidad son delicados. Hay que trabajar siempre en las condiciones más óptimas, aunque esto es algo que ocurre en multitud de dispositivos, aunque si es verdad que la tecnología es mucho más delicada a las condiciones ambientales o también al sistema de carga que tiene.
Vigila las temperaturas del Mac
Los dispositivos electrónicos están diseñados para funcionar a temperaturas adecuadas, y en el caso de los Mac, no deben estar en ambientes que superen los 40 grados. Si el Mac alcanza la temperatura máxima de seguridad de la CPU, que suele ser 100 grados, se apagará para evitar daños en los componentes. Por ello, es importante evitar la exposición directa al sol y asegurarse de que las vías de ventilación no estén bloqueadas, como al usar el Mac sobre las piernas o en superficies blandas como una cama.
Pero al igual que ocurre con las situaciones de alta temperatura, también se extrapola a las de baja temperatura. Hay que tener en cuenta el rango tanto de manera superior como por la parte inferior. Siempre debe estar en las condiciones óptimas de funcionamiento para que funcione correctamente
De todas formas, esto es muy fácil de comprobarlo. Si se apaga repentinamente cuando alcanza una temperatura, la cual podría quemar tu piel, será normal, y lo notarás. Sin embargo, si lo hace sin motivo, y no estando ni caliente ni frío, entonces puedes descartar que sea por esta razón, ya que, como te digo, es muy fácil de detectar.
Comprueba que se está cargando
Puede parecer algo completamente lógico, pero en muchas ocasiones se puede pasar por alto. Hay que tener en cuenta que en las especificaciones del sistema de carga que se utiliza para poder administrar energía a la batería. Hay muchos cargadores en el mercado que se venden como compatibles con cualquier tipo de Mac. Pero en la gran mayoría de ocasiones hay que sospechar en este sentido, y visualizar las especificaciones técnicas de los cargadores.
En este caso hay que revisar la potencia y el amperaje que ofrece cada uno de los cargadores que quieres usar. Debes saber que también la marca influye, con el objetivo de administrar la energía correctamente a la batería. Pero en el caso de iMac, hay que comprobar las especificaciones del cable y el transformador que se incluye para poder mover todos los componentes internos del dispositivo. En el caso de que un iMac no cuente con la energía necesaria, se van a detener los componentes del dispositivo.
Si tienes un MacBook conectado a un monitor externo revisa esto
Si se da el caso de que utilizas tu MacBook conectado a una monitor externo para trabajar, tienes que asegurarte de que esté cargando. Si conectamos nuestro MacBook a un monitor externo, necesitaremos un cable HDMI y un adaptador (excepto en los modelos más nuevos). Pues bien, a veces puede pasar de que el ordenador esté con poca carga de batería, sin cargar y conectado al monitor externo.
Eso hace que se requiera mucha más energía para funcionar y, por tanto, puede provocar que tu MacBook se apague de forma inesperada. E incluso, que te pida cargar la batería cuando, a lo mejor, te quedaba un 20% o un 30%. El truco es tenerlo conectado a la corriente cuando se usa con un monitor externo. Así no solo evitaremos hacer ciclos en la batería, evitando que se dañe y también, evitando que nuestro MacBook se apague inesperadamente por culpa de la batería, como veremos más adelante.
Actualizar software del Mac
Y aunque nos hayamos centrado principalmente en el hardware, hay que destacar que también el software puede ser uno de los grandes responsables de estos fallos en el arrancado del ordenador. A continuación, analizamos las situaciones necesarias que están relacionadas con el hardware.
Los virus pueden provocar estos fallos
Es una realidad que en la red se pueden encontrar numerosos archivos maliciosos que van a atacar tu dispositivo. Las consecuencias de ejecutar alguno de estos son realmente variadas, y uno de estos es el reinicio del Mac de manera inesperada o el apagado de manera repentina. Sin duda es algo bastante molesto, y que puede tener relación principalmente con el aumento en ciertos procesos cuando se está trabajando con este virus instalado. Es por ello que es realmente importante que se tenga una seguridad máxima en los equipos cuando se está trabajando en la red.
Ante esta situación lo que vas a tener que hacer es realizar una revisión de las últimas instalaciones que has hecho. De esta manera podrás identificar el posible problema de software que puede llegar a tener. Igualmente, también se puede ejecutar algún tipo de analizador. De esta manera se analizarán todos los archivos que está en la unidad de almacenamiento para buscar algo que sea completamente extraño.
Revisa, a su vez, que esté actualizado a la última versión, esto podría solucionar problemas de cualquier tipo. No debería ser la principal causa de que el Mac se reinicie, pero nunca hay que descartarla.
Realiza una restauración del sistema
En casos extremos de problemas en el sistema operativo, la restauración es a menudo la mejor opción. Si tienes un virus, la forma más segura de eliminarlo es restaurando el sistema, lo que deja el dispositivo como nuevo. Sin embargo, si durante la restauración ocurre un apagado repentino, el problema podría estar en el hardware y no en el software.
Antes de realizar este proceso, es crucial hacer una copia de seguridad para evitar la pérdida de información en caso de que algo falle durante la restauración, especialmente si el fallo no está relacionado con el software.
Problemas de batería en los MacBook
Los MacBook tienen baterías que se degradan con el tiempo, y uno de los síntomas de problemas es que se apagan repentinamente, incluso cuando el indicador muestra carga. Esto puede ocurrir, por ejemplo, con un 70% de batería aparente, y al intentar encender el MacBook, aparece la señal de que debes conectarlo a la corriente. Si al enchufarlo muestra un porcentaje de carga diferente, podría ser señal de desajuste en la batería, pero no siempre significa que necesite reemplazo. Si ocurre frecuentemente o la batería tiene mucho desgaste, es probable que debas acudir al servicio técnico.
En algunos casos, un MacBook con poca antigüedad solo necesita un calibrado de la batería. Este proceso ayuda a restablecer el funcionamiento de las celdas de litio, evitando apagones repentinos y falsas lecturas de carga. Para calibrar la batería, usa el Mac hasta que se apague por falta de carga, déjalo reposar seis horas, y luego cárgalo al 100% sin interrumpir el proceso. Si el problema persiste después del calibrado, puede ser necesario reemplazar la batería.
Contacta con Soporte de Apple
Si el problema persiste, el último recurso es contactar con el Soporte de Apple. Ellos realizarán un diagnóstico completo del Mac y revisarán los componentes para identificar el fallo. La reparación será gratuita si el dispositivo está dentro de la garantía, pero solo si no ha sufrido daños físicos relevantes. Si el fallo es de origen de Apple, la reparación está garantizada sin coste.
Lo más recomendable es acudir directamente a una tienda Apple, ya que son los únicos autorizados para realizar reparaciones con piezas originales. Si no tienes una tienda cerca, puedes acudir a puntos autorizados como K-Tuin o MediaMarkt, que ofrecen el mismo servicio sin perder la garantía.