Día a día podemos llegar a trabajar con decenas de archivos de vídeo en nuestro Mac, y aunque se incluye un reproductor nativo a veces se queda corto. Es por ello que hay que buscar otras alternativas de terceros y una de ellas sin duda es VLC, uno de los mejores reproductores por excelencia para macOS y Windows.
La clave del éxito de VLC
Con el paso de los años VLC se ha convertido en un programa tremendamente popular en macOS, Windows y Linux. Esto es debido principalmente a que es un software gratuito y que permite reproducir una amplia cantidad de formatos de archivos sin descargar códecs. Además incluye la posiblidad de adaptar la reproducción tanto de vídeo y audio para una gran cantidad de dispositivos. Otra de las grandes bondades de VLC es que admite la reproducción por streaming introduciendo un simple enlace. Pero aquí no queda el motivo del éxito, ya que con la descarga de complementos se puede integrar con otro tipo de programas y servicios.
Funciones destacables de VLC
Como hemos dicho anteriormente, son muchos los formatos de video que admite este software. Entre estos destaca por ejemplo Dirac, DV, H.264/MPEG-4 AVC, WebM, MJPEG, VC-1, VP5… entre otros muchos. Esto hace que se convierta en la mejor opción cuando tenemos un archivo de video que no es reconocido por algún problema. En el caso de las transmisiones no hay ningún problema al admitir la transmisión MPEG y DivX siendo una interesante opción para ver por ejemplo conferencias de presentación de Apple con un simple enlace. Llega a tal punto que se pueden reproducir archivos .zip sin tener que ser descomprimidos y hacer que ocupe espacio en el disco. Incluso ver el comienzo de un vídeo que estamos descargando es posible y decidir si merece la pena o no seguir descargándolo.
En el caso de que el vídeo que estamos reproduciendo tiene un sonido bajo, podremos forzar la subida de sonido hasta el 200%, o meter diferentes archivos en una lista de reproducción.
Todas estas funciones se integran en una interfaz que donde es tremendamente fácil de navegar gracias a la sencillez visual y la limpieza que la caracteriza. Es cierto que no es tan elegante como la de otros reproductores de otros desarrolladores. Pero esto es lo que damos a cambio de tener un programa que funciona perfectamente bien y es totalmente gratuito y además de código abierto. Esto hace que muchos usuarios descarguen VLC en primer lugar, gracias a la confianza que se ha ganado al no utilizar anuncios o spywire. Pero como hemos mencionado anteriormente no se queda en un programa gratuito, sino que engloba toda una serie de complementos que lo hace un software personalizable y adaptable.
Pero aunque nos centramos en los archivos de vídeo, también puede reproducir archivos de música. Integra un buscador para tener toda la información de una canción que estamos reproduciendo. Y como en los casos anteriores, la gran variedad de formatos que soporta lo hace una alternativa tremendamente atractiva.