Los ordenadores de pequeñas dimensiones se han convertido en una opción muy interesante para aquellos que quieren articular su escritorio de trabajo de manera sencilla, con un dispositivo que ocupe lo menos posible, acompañado simplemente de una pantalla y los periféricos.
En este terreno, los Mini PC son una opción que va ganando enteros, pues cada vez dejan más a un lado las limitaciones en cuanto a hardware, erigiéndose como auténticas bestias en términos de rendimiento.
¿Por qué elegir un Mini PC?
Conocidos por ofrecer características recortadas y responder adecuadamente en situaciones de productividad básicas, estos dispositivos ya son capaces de bastante más y se han convertido en la opción ideal para quienes trabajen en casa y opten por tener un escritorio simple y limpio, sin que su bolsillo se resienta.
Estos equipos en miniatura no solo ahorran espacio en tu mesa y suponen una solución más rentable, sino que cuentan con una conectividad completa y consumen menos energía que un ordenador convencional. Además, su tamaño permite ser transportados cómodamente, haciendo las delicias de aquellos que necesiten trabajar en una segunda residencia.
Para tareas que requieran de un rendimiento sobresaliente en trabajos de diseño gráfico o edición de vídeos, no son la mejor opción. Sin embargo, estos dispositivos funcionan de manera inmaculada en tareas de ofimática, así como en un uso básico de internet o consumir contenido multimedia. Por tanto, puede ser una gran solución para la mayoría de los usuarios.
El Mac Mini es la mejor opción
Cientas son las alternativas que dan forma al mercado de los Mini PC, pero si buscas un dispositivo duradero, que se actualice durante años y que brinde un rendimiento excelente, el Mac Mini de Apple es tu equipo. Además, su atractivo diseño, como es habitual en los productos de la compañía de Cupertino, y su más que rentable preci0 (649 € en Mediamarkt), hacen de este producto la opción más atractiva para quienes sienten predilección por el sistema operativo de la manzana y no quieren desembolsar más del doble en un Macbook.
Equipado con 8 GB de memoria RAM (ampliables hasta 32), el mini ordenador de 2023 iguala la productividad de sistemas Windows que duplican o incluso llegan a las 32 GB de RAM. Equipado con chip M2 (con posibilidad de montar un chip M2 Pro), se convierte en una herramienta de trabajo potente, siendo capaz de llevar a cabo tareas exigentes con solvencia, gracias también a su CPU de 8 núcleos.
El Mac Mini de Apple también resuelve perfectamente el trabajo con aplicaciones de un nivel gráfico alto, lo que le convierte en una opción a tener en cuenta para aquellos trabajadores artísticos. Su sistema operativo, macOS actualizado, fluye a la perfección, acompañado de 256 GB de almacenamiento SSD, lo que permite una velocidad de lectura y escritura increíblemente rápida. Bien es cierto que el espacio de almacenamiento puede quedarse corto en algunas situaciones, por lo que escoger un modelo con una mayor capacidad será una opción a tener en cuenta, considerando también el consecuente incremento en el precio.
En términos de conectividad tampoco se queda atrás. Este equipo de pequeñas dimensiones equipa dos puertos USC-C Thunderbolt 4, dos USB-A, una entrada HDMI, un puerto de red Ethernet y una entrada para auriculares. Todo esto viene acompañado de un magnífico Wifi 6E de primera clase, que permitirá transferir archivos a toda velocidad, además de Bluetooth 5.3 y la posibilidad de conectar hasta dos pantallas con una resolución de hasta 6k y una tasa de refresco de 60 Hz.
Eficiente como pocos y con un diseño minimalista, acabado en un elegante aluminio de una sola pieza, marca la diferencia ante sus competidores, que no muestran un diseño tan premium y cuyas características y precios tampoco les convierten en mejores opciones. El Mac Mini demuestra que un ordenador no tiene por qué ser tan grande y se alza como la mejor opción para aquellos que quieren decir adiós al tradicional y ruidoso ordenador de torre.