Las Vision Pro parecen más un iPad que un ordenador computacional y te lo demuestro en tres minutos

Cada vez tenemos más review y análisis sobre las nuevas Vision Pro, donde encontramos usuarios que les parece una revolución similar a la que tuvo lugar con el lanzamiento del iPhone de primera generación, mientras que otros consideran que se trata de un producto fantástico, pero no es el producto que les permita mejorar su día a día o poder integrarlo en su flujo de trabajo. Por ello, en este post, sin ser haters ni fanboy, vamos a analizar en profundidad qué puedes hacer con ellas y por qué son un producto revolucionario, aunque no sean para ti.
Monitor externo para todo y para tu día a día
Una de las utilidades que más rendimiento podemos extraer los usuarios es que se trata de un monitor externo portátil, es decir, un monitor que podemos utilizar para trabajar diariamente con él y con el tamaño de pantalla que queramos.
El problema es que solamente podemos utilizar una pantalla como monitor, siendo uno de sus puntos a mejorar en esta primera generación. No obstante, si analizamos el planteamiento de Apple, tiene sentido que sea así, porque podemos crear un monitor del tamaño que estimemos oportuno y tener los laterales de nuestro campo de visión para otras ventanas.
Con respecto a su fluidez, es cierto que las pruebas realizadas muestran que no tienes la misma fluidez que tienes con un monitor 4K, es decir, los contenidos de mi Samsung M8 o en la Studio Display de Apple. Esta problemática es completamente normal, porque estamos ante un producto que genera un contenido virtual y no físico, como ocurre en los citados equipos. Eso sí, la sensación de mover el Mouse por la interfaz de la visión Pro es bastante fluida.
Productividad
Uno de los problemas que tenemos con los portátiles con paneles muy grandes es que no podemos trabajar con dos o más aplicaciones porque por cuestiones de espacio no podemos visualizar bien el contenido. En este sentido, la posibilidad de tener diferentes ventanas nos permite poder trabajar y ser más productivo, sobre todo si estamos trabajando con contenido audiovisual o estamos revisando una serie de proyectos y quieres tener el chat empresarial siempre activado.
Hasta cierto punto esta función es increíble. Sin embargo, el problema viene en que hay muy pocas aplicaciones para trabajar. Por ejemplo, aplicaciones como Figma no está disponible, Slack no está disponible y seguramente otras aplicaciones que requieren un gran procesamiento nunca llegarán a estar en este tipo de productos, no por falta de rendimiento de sus Silicon, sino por la complejidad que tiene que ser aprender a usarlas en un entorno de interacción completamente nuevo.
En cambio, donde sí es una revolución son en las videollamadas, ya que podemos utilizar un avatar con FaceTime con expresiones faciales muy fidedignas y expresivas.
En definitiva, este producto es una especie de iPad computacional porque tiene los mismos problemas de productividad que el iPad, como la falta de aplicaciones profesionales, pero con la posibilidad de tener una pantalla de mayor tamaño y diferentes ventanas. Es cierto que se trata de una primera versión y seguramente irá mejorando con las actualizaciones que llegarán en los próximos meses. Apple, al igual que pasó con el Apple Watch, necesitará varias generaciones para pulir este dispositivo, aunque nadie tenga duda, de que este producto será una nueva referencia en el mercado computacional.