Ya sabemos como es el iPhone SE por dentro, ¿cambia respecto al iPhone 8?
Mucho se habló durante años de una segunda generación del iPhone SE y ahora que ya la tenemos aquí es conveniente revisar qué es lo nuevo que trae. En términos visuales, su exterior es muy similar al iPhone 8, aunque internamente se sabe que tiene algunas novedades. ¿Qué ha cambiado y qué secretos alberga?
Pocos cambios del iPhone 8 al iPhone SE 2020
Desde iFixit se dedican a publicar diferentes guías de reparación de dispositivos para que sean los usuarios más manitas los encargados de llevar a cabo estos procesos, pero también estos desmontajes nos sirven para comprobar como son los equipos por dentro. El iPhone SE 2020 ha sido el último de ellos en ser mostrado y lo cierto es que, para bien o para mal, ha sorprendido a muchos.
Lo que más destaca a primera vista, al igual que si lo viésemos por fuera, son las evidentes similitudes con el iPhone 8. Sin ir más lejos, ambos disponen de la misma cámara, aunque en el caso del iPhone SE podemos distinguir algunas funcionalidades exclusivas que se implementan mediante software, como es el modo retrato. También la batería es idéntica, por lo que también este componente podría ser utilizado en ambos equipos sin problemas. De hecho es posible tener fundas para el iPhone SE 2020 que sean compatibles también con este otro y con el iPhone 7.
El Taptic Engine es otro elemento compartido por ambos equipos, como también lo es las carcasas delanteras y traseras. Pese a que estas últimas tienen sutiles diferencias, como la posición del logotipo de la manzana, lo cierto es que encajarían perfectamente en uno y otro equipo. También la bandeja de la SIM o el sensor de proximidad son piezas idénticas. No obstante llama la atención que, siendo iguales, el precio de reparación de pantalla del iPhone SE 2020 sea más caro que el del 8.
Las diferencias que encontramos tienen relación con el chip A13 Bionic que monta el nuevo dispositivo de Apple, a diferencia del A11 Bionic que lleva el iPhone 8. Esto es algo que ya conocíamos de ante mano, pero que se puede apreciar a simple vista desmontando el dispositivo. El Touch ID, pese a ser igual, tampoco sería homologable al otro dispositivo por motivos de seguridad. Al igual que el sensor True Tone, el cual requeriría de conocimientos de programación para que pudiese activarse en el otro iPhone si se intercambia.
Las prestaciones no son las mismas
Pese a lo visto en el desmontaje, hay que tener en cuenta que este nuevo smartphone realmente tiene diferencias sustanciales respecto al iPhone de 2017 con el que comparte gran parte de diseño y componentes. Las razones para comprar el iPhone SE 2020 radican básicamente en el rendimiento del procesador, el cual no solo gestiona algo mejor la autonomía, sino que es capaz también de mejorar el rendimiento general del dispositivo con iOS 13 y el resto de versiones que le vengan durante unos cuantos años.
Precisamente ese procesador es también el que le permitió a Apple implementar mejoras en las cámaras a través del software pese a seguir manteniendo las mismas lentes que en el teléfono de 2017. Gracias a ello, este iPhone SE de segunda generación es equiparable en fotografía al popular iPhone XR lanzado en 2018 y del cual se destacó su polivalencia en esta faceta a pesar de tener una sola cámara en la parte trasera.
Es posible que, como es habitual, iFixit publique un vídeo en próximos días en el que podamos ver con más detalles el interior del iPhone SE. De esa forma además podremos ver cada componente de una forma más detallada. Sin embargo, no parece que cuando se conozca todo vaya a cambiar la perespectiva del dispositivo, estando muy enfocado, por ejemplo, a ser el iPhone para una persona mayor.