Le roban el coche, lo sigue gracias al AirTag y se enfrenta al ladrón
Los AirTags son localizadores de objetos. Gracias a ellos tenemos a mano la posibilidad de saber donde está una maleta, una mochila, nuestro portátil, e incluso… ¿un coche? No es la primera vez que conocemos casos en los que estos dispositivos y los coches protagonizan historias rocambolescas. No obstante, la que te traemos hoy, tiene un final feliz. ¿Quieres saber de qué se trata? ¡Sigue leyendo!
En los Estados Unidos pasan cosas. Y en esta ocasión, hay varios ingredientes que conforman una anécdota que, por fortuna del propietario, no se ha desmadrado. No estamos hablando del hecho de recuperar una posesión, sino del hecho de enfrentarse a un ladrón.
El coche robado era lo de menos
El coche, un BMW. El propietario, un hombre llamado Philip Obando. El lugar, el estado de California. El propietario había metido un AirTag dentro del vehículo, para que en caso de que pasara algo, pudiera seguir la pista. Spolier: han pasado cosas. Le robaron el coche, y de acuerdo a los hechos, Obando se despertó, salió de su casa y, ¡sorpresa! El coche no estaba donde lo había dejado aparcado.
Los AirTag pueden localizarse en todo momento gracias a la red de Find My. En este caso, el dueño decidió optar por una solución drástica. ¿Llamar a la policía? Bueno, no sin antes ir a la ubicación del coche. Y la segunda sorpresa, no fue encontrarse con el coche. Cuando llegó a su destino, la escena contaba con los siguientes protagonistas:
- Su BMW, pero con la matrícula cambiada
- El coche, lavado en un túnel
- El ladrón, durmiendo dentro de su coche
Fue en una gasolinera de la zona, donde Obando y su esposa se encontraron con la escena. Lo que ocurrió después, fue que hizo sonar el cláxon de su coche, gracias a una llave de repuesto que él mismo tenía. Esta tenía esta funcionalidad. Al ver el ladrón que poco podía hacer, simplemente, salió corriendo. Por suerte, no se enfrentaron.
Qué hacer si te roban el coche y lo encuentras con un AirTag
Aunque parezca algo obvio, en este apartado vamos a hacer un repaso de qué es lo que se debería de hacer en estos casos. Imaginemos, por un momento, que tenemos un coche con un AirTag dentro y nos lo roban.
¿Vamos directamente a por la ubicación que nos aparezca? De poder, podemos. Pero otra cosa es que esto sea algo peligroso y poco racional, ya que no sabemos qué nos podemos encontrar.
Lo que, en teoría, es la mejor idea es ir a la policía, y proporcionar todos los datos del coche. También, explicar la ubicación en la que se ha visto el vehículo por última vez, la fecha y la hora. Hay que dar descripciones exhaustivas del coche, tanto a nivel de papeleo, como del estado estético, en el caso de que tenga algún elemento que lo haga distinguido.
Y si tenemos un AirTag metido dentro del coche, hay que avisar de que el dispositivo está dentro, y mostrar la ubicación en tiempo real. Esto son, tan sólo, unos consejos. A partir de ahí, esperamos y deseamos que no os encontréis al ladrón de vuestro coche durmiendo dentro de él, tras haberle cambiado la matrícula. Eso sí, todo un detalle que al menos os lo lave.