Actualizar el iPhone es una tarea bastante básica que todo usuario debe practicar varias veces a lo largo de la vida útil de su equipo. Cada pocos meses Apple libera una nueva versión de su sistema operativo estrella, iOS. Lo que se debe tener en cuenta es que siempre hay que saber actualizar el equipo de manera correcta, y en este artículo te contamos como vas a poder hacerlo satisfactoriamente.
Antes de actualizar
Antes de realizar el proceso de actualización como tal, es importante tener en cuenta diferentes aspectos para que sea un éxito. No hay que limitarse únicamente a hacer la actualización dentro de Ajustes, ya que hay que ser bastante previsores como te contamos a continuación.
Crea una copia de seguridad
Esta es una operación vital antes de hacer una actualización de sistema operativo. Con una copia de seguridad se tiene una copia de toda la información que tienes dentro del iPhone, como por ejemplo los contactos o todos los archivos locales que existen, e incluso las aplicaciones que tengas instaladas. Es realmente valioso, porque en el caso de que salga algo mal a la hora de hacer una actualización podrás tener tu iPhone tal y como empezó gracias a esta copia.
Son muchos los sistemas que se pueden encontrar para efectuar esta operación. El más típico es hacer la copia en iCloud, siempre que tengas almacenamiento disponible para poder subir toda la información necesaria. Pero si no es así, siempre se puede hacer la copia de seguridad en un Mac con Finder, o en un PC con iTunes. En todo momento deberás acordarte del método utilizado, ya que este mismo deberás usarlo en el caso de que requieras restaurar toda esta información. Como el respaldo con iCloud es el más típico, te contamos los pasos a seguir en esta situación:
- Conecta el iPhone a la red Wifi.
- Ve a Ajustes > Pulsa sobre tu nombre > iCloud.
- Pulsa sobre Copia de seguridad de iCloud.
- Pulsa en Realizar copia de seguridad ahora.
Mantente conectado a la red Wifi
Como es lógico, cuando se va a realizar la actualización de iOS es necesario siempre descargarlo de los servidores de Apple. En este caso el peso de los archivos puede llegar a ser considerable y es por ello que no se recomienda en ningún caso hacer la descarga a través de datos móviles. Puede llegar a suponer un consumo excesivo de la tarifa de datos y sobre todo, puede ser una conexión inestable.
Hay muchos casos en los que las actualizaciones no se han descargado de manera completa debido precisamente al uso de plan de datos móviles. Es por ello que siempre se exige esta conexión estable, también para lograr que la velocidad de descarga sea mucho mayor. Si bien hay que tener en cuenta que si hablamos de una actualización que es bastante reciente la lentitud de descarga brillará.
Es importante tener el iPhone cargado y enchufado a la corriente
Uno de los requisitos que establece Apple para poder realizar la actualización de un iPhone, es tener una batería mínima. En el caso de que tener muy poca batería, la actualización no va a comenzar, ya que se pueden terminar generando varios errores. Ante esta situación siempre hay que tener el mínimo de carga establecido que normalmente es del 50%, pero también hay que tener el dispositivo conectado a la corriente eléctrica.
Todo esto se debe a que la actualización es un proceso que puede llegar a consumir mucha energía eléctrica. Esto hace necesario que la alimentación se realice a través de la conexión eléctrica con un mínimo de 5 W de potencia. En estos casos se limita el uso de los cargadores inalámbricos al no ser completamente eficientes. En estos casos se puede comprobar que el gasto energético es mayor a la energía que entra. Esto es completamente ineficiente, y es por ello que si haces una carga con este sistema se va a exigir un mínimo del 50% para poder comenzar la instalación. Lo que se quiere evitar con todo esto es la generación de problemas en el caso de que no se pueda completar la actualización por falta de energía.
Todas las formas de actualizar el iPhone
Una vez se han tenido en cuenta las recomendaciones anteriores, ya se puede proceder con la actualización como tal a la versión más reciente. Obviamente, lo primero que se debe tener en cuenta es que siempre exista una actualización compatible y reciente presente para poder llevar a cabo este proceso. En caso afirmativo, te contamos las diferentes vías que existen para realizar esta operación.
De manera inalámbrica
Uno de los procesos más usados para poder llevar a cabo la actualización de un iPhone no quiere ningún cable. Esto es lo que se conoce como actualización OTA. El proceso es realmente simple, ya que se hace a través de los ajustes del dispositivo y todo es automático. En concreto para comenzar con el proceso de búsqueda e instalación, se deben seguir los siguientes pasos:
- Enchufa el dispositivo a una toma de corriente, y conéctalo a internet a través de Wifi.
- Ve a Ajustes.
- Dirígete a General.
- Pulsa sobre Actualización de software.
- Si hay una actualización disponible, aparecerá la información de esta como el peso o la descripción disponible.
- Elige la actualización de software disponible que instalar, en el caso de que haya dos versiones.
- Pulsa sobre Descargar e instalar. Aquí el proceso de descarga se iniciará.
- Introduce el código de desbloqueo del iPhone.
- Pulsa sobre Instalar ahora.
Como se ha comentado previamente, aquí el proceso de descarga puede variar bastante. Sobre todo nos referimos al tiempo que se consume. La compañía no ofrece en ningún caso un temporizador con el tiempo que se necesita, ya que es muy variable. Se puede visualizar una barra de carga, que en muchas ocasiones verás que se queda totalmente congelada. Es por ello que debes reservar un parte de tu tiempo para estar controlando el proceso de actualización que no es especialmente rápido.
Haciendo uso de un Mac o PC
Otro de los métodos que existen para poder actualizar el iPhone es a través de un ordenador. Ya sea un Mac o un PC, siempre se va a poder realizar este proceso de una manera más segura. En este caso la actualización se descarga en el ordenador en cuestión y se termina transfiriendo al iPhone a través del cable que realiza la conexión que es obligatorio.
En el caso de que tengas un Mac con macOS Catalina o una versión posterior, debes saber que es obligatorio hacer uso de Finder para poder hacer la actualización. Simplemente, vas a tener que seguir los siguientes pasos:
- Conecta el iPhone al Mac.
- Abre la ventana del Finder.
- Selecciona el dispositivo en la barra lateral izquierda de la ventana del Finder.
- Haz clic en General y luego en Buscar actualización.
- Haz clic en Descargar y actualizar.
- Introduce el código de acceso.
Pero obviamente esto no ocurre si hablamos de un Mac que cuenta con una versión inferior a Catalina, o simplemente nos referimos a un PC. En estas dos situaciones vas a necesitar hacer uso de iTunes para poder descargar e instalar la actualización. Antes de comenzar en estos casos siempre hay que revisar que se tenga la última actualización disponible del programa, y una vez hecho esto seguir los siguientes pasos:
- Abre iTunes en tu Mac o PC.
- Conecta el iPhone al ordenador.
- Haz clic en el botón del dispositivo en la barra de herramientas de iTunes.
- Haz clic en Buscar actualización.
- Pulsa sobre Descargar y actualizar.
- Introduce el código de acceso.
Actualizaciones automáticas
Una de las características que se pueden encontrar en iOS es la actualización automática. Esta es una función que puede ser activada en la configuración inicial de un iPhone, aunque también se puede configurar posteriormente. Hay que tener en cuenta que las actualizaciones se realizan siempre de noche y cuando el iPhone está conectado al cargador. De esta manera se consigue actualizar el dispositivo sin que te enteres. Para configurarlo en el caso de que no lo hicieras al principio, simplemente debes seguir los siguientes pasos:
- Ve a Ajustes > General > Actualización de software.
- Pulsa Actualizaciones automáticamente y activa Descargar actualizaciones de iOS.
- Activa Instalar actualizaciones de iOS.
Los problemas que se pueden presentar
Es una realidad que cualquier proceso de instalación presenta un porcentaje de fallo. Esto puede provocar que la actualización no se pueda instalar por muchos motivos. A continuación analizamos aquellos que son más importantes y sobre todo que son más comunes. Es algo realmente crucial, ya que la compañía siempre recomienda tener instalada la última versión de software disponible.
Almacenamiento insuficiente
Uno de los fallos más frecuentes que se pueden presentar es la falta de almacenamiento. En el caso de que se tenga una gran cantidad de información en el dispositivo, ya sea de aplicaciones o de archivos locales, la actualización no va a poder descargarse ni instalarse. En este caso se verá un aviso emergente en el que se solicita la eliminación de información para poder continuar con el proceso de instalación.
En este caso se puede hacer uso de las herramientas nativas de iOS en las que automáticamente se rastrean los archivos de gran tamaño para eliminarlos. Pero lo más típico en estos casos siempre es recurrir a la eliminación de las aplicaciones que no uses normalmente. En este caso también se pueden encontrar herramientas para poder determinar el uso que se le dan a las aplicaciones. De esta manera te va a poder ayudar siempre a tener las apps imprescindibles.
Fallos a la hora de conectar con el servidor
Cuando se solicita la actualización, esta se descarga automáticamente de los servidores de Apple. Esto es algo que ocurre tanto si realizas una actualización vía OTA como si haces uso de un ordenador. La conexión a este servidor de Apple a veces puede terminar fallando, y hace que algunas actualizaciones no se puedan instalar vía OTA. De esta manera el propio dispositivo te va a requerir que la instales haciendo empleo del Finder o de iTunes para tener la garantía de estar haciéndolo correctamente.
Esto es algo que puede ocurrir sobre todo cuando se hace empleo de conexiones VPN o proxy. En estos casos casi siempre hay diferentes incompatibilidades, ya que Apple requiere una conexión lo más limpia posible. Se deberá optar en estos casos por desactivar la VPN que tengas activada en tu dispositivo. Pero también lo más sano puede llegar a hacer uso de un ordenador para poder realizar la descarga.
Actualización congelada
Esto es algo que puede llegar a ser frustrante durante el proceso de instalación. Básicamente, cuando se están sobreescribiendo los datos, el iPhone puede encontrar algún bug que le impide continuar con la instalación. En estos casos lo que se provoca es que la odiosa pantalla en negro de actualización se convierte en infinita y no se puede salir de esta. Dentro de lo molesto que puede llegar a ser, si has sido previsor es posible que no tengas que echar de menos ningún dato.
Ante este problema que puede provocar que la actualización no culmine completamente, te vas a ver obligado a formatear el dispositivo completamente. Esto es algo fácil, ya que simplemente se deberá acceder al modo DFU y que sea detectado como un equipo en recuperación por el Mac o PC. De esta manera simplemente se volverá a descargar el archivo de actualización y se aplicará desde cerro borrando previamente todo lo que había. Es importante ante estas situaciones copias de seguridad, porque de este modo no vas a perder información si se presenta este fallo.