En el día a día son muchas las aplicaciones que se usan en un Mac. Pero el funcionamiento a veces no es perfecto, y se pueden encontrar algunos problemas importantes en su rendimiento. Lo más típico es el hecho de que las apps se queden pilladas o congeladas, y no se pueden cerrar. En este artículo te contamos cómo vas a poder cerrarlas fácilmente.
¿Por qué se quedan pilladas las aplicaciones?
Como hemos comentado anteriormente, macOS es un sistema que al igual que otros no es perfecto. Pero más allá que el sistema en sí, también se puede encontrar la mala compatibilidad de algunas aplicaciones. En un primer momento, cuando funcionan mal estas apps, se puede ver como se ralentizan por completo y al final puede terminar provocando que la aplicación en concreto se quede completamente pillada, afectando a la estabilidad del sistema en general. Pero una de las grandes preguntas que pueden llegar a tu mente es el por qué ocurre esto. Lo analizamos en los siguientes apartados.
Sobrecarga del procesador
Uno de los principales puntos a tener en cuenta es el procesador del ordenador. Se puede dar el caso de que una aplicación en concreto requiera de mucha capacidad de procesamiento y esto supone finalmente que genere un gran estrés para el dispositivo. El problema llega en este caso cuando se tienen muchas aplicaciones que están abiertas y que consuman una gran cantidad de recursos. Se puede dar el caso, por ejemplo, de tener un juego abierto que tiene unos gráficos bastante potentes y también una aplicación que actúe como editor de vídeos.
En estos casos, si tienes un procesador que funciona de manera limitada y no es demasiado potente, se va a tener un grave problema. Físicamente, no va a ser posible que se ejecuten programas que requieren de una potencia mayor a la que se puede ofrecer. Es por ello que se queda completamente paralizado sin activado, y finalmente se optará por tener que forzar la salida del programa. Esto se debe a que en la mayoría de las ocasiones hasta se hace complicado cerrarlo de manera tradicional el programa al no responder de ninguna manera.
Mala optimización del desarrollador
Es un hecho que los desarrolladores sacan a veces aplicaciones que no están optimizadas. Es decir, a la hora de trabajar en el desarrollo no han trabajado para que funcionen correctamente con una versión concreta de macOS o simplemente al estar en una versión muy temprana cuenta con varios bugs. Obviamente, es algo que el ordenador no es capaz de gestionar, ya que a veces los bugs pueden terminar colapsando el hardware general. Es realmente importante siempre tener una buena optimización en las apps con el objetivo de que funcionen de manera fluida.
En este caso finalmente vamos a tener unas aplicaciones que durante su funcionamiento en macOS van a sufrir numerosos problemas. Esto es algo que se va a poder detectar siempre realizando una búsqueda en internet, sobre todo en los foros, y también en redes sociales. Para poder solucionarlo finalmente deberás optar por esperar a una actualización que libere el desarrollador solucionando todos estos inconvenientes. Igualmente, recomendamos optar por descargar las apps de la App Store que cuenta con diferentes filtros para poder evitar especialmente esto.
Incompatibilidad de la app
Hay que tener en cuenta que todas las aplicaciones cuentan con unos requisitos para poder usarse en un Mac. Principal radica en el hardware con el que se cuenta y también con la versión del sistema operativo. Esto es algo realmente relevante, ya que si no es compatible, vas a encontrar numerosos programas congelados mientras se está utilizando en el día a día. Finalmente, lo que se va a conseguir es que difícilmente se pueda cerrar por los procedimientos tradicionales. Al final te verás obligado a tener que forzar un cierre de aplicación.
Para poder evitarlo, siempre tendrás que optar por leer detalladamente todos los requisitos que describen los desarrolladores. Es cierto que a priori, cuando una app no es compatible, no se va a poder conseguir instalar correctamente. Pero es una realidad que existen muchos métodos para poder realizar la instalación de ejecutables que a priori no se pueden instalar por los requisitos que se van proponiendo.
Pasos para forzar el cierre de una app
En el caso de que finalmente tengas una aplicación que deje de responder y no se va a poder cerrar de forma normal, vas a tener que usar la función Forzar salida. A priori, te recordamos que para cerrar normal una aplicación simplemente se tiene que pulsar Salir en el menú de las aplicaciones que se encuentra en la barra de menús. Pero también se puede hacer uso de la combinación Comando + Q. Pero como decimos, no siempre va a poder funcionar correctamente.
Ante esta situación, se va a tener que optar por forzar el cierre pulsando sobre la combinación de teclas Opción + Comando + Escape. Se puede decir que este es el equivalente en un PC a un clásico Control + Alt + Suprimir. Una vez se pulsa esta combinación, finalmente se tendrá una app denominada Forzar salida con una serie de aplicaciones que en teoría están en ejecución en ese momento. Simplemente, se va a tener que pulsar sobre la app en cuestión que ha dejado de funcionar y pulsar sobre Forzar salida en la esquina inferior derecha.
Hay que tener en cuenta que en estos casos hasta se va a poder forzar el cierre de Finder si deja de responder. Esto es algo que puede ser algo bastante curioso, pero siempre puede ocurrir que el sistema se termine colapsando de esta manera, para poder volver a iniciar Finder automáticamente.
Qué hacer si no se cierra
Como es lógico, en algunas ocasiones se va a poder presentar el problema de que no se pueda forzar el cierre de la aplicación. Pero en este caso hay algunos procedimientos a tener en cuenta siempre si no vas a poder salir correctamente. La primera solución que se presenta en estos casos es el reinicio del sistema operativo. Sin duda es la forma más adecuada de cerrar todos los procesos que están abiertos y que se han quedado congelados. En este caso se incluye tanto las aplicaciones como otros procesos que son secundarios y que pueden generar diferentes conflictos.
En un segundo punto, si la app no se cierra, pero el resto del sistema está funcionando con normalidad, vas a tener que optar por desinstalar la aplicación en cuestión. Esto es algo completamente radical, pero que al final es una gran solución para aquellas aplicaciones que no estén funcionando correctamente y no quieres reiniciar para no perder otro trabajo que tengas activo en ese momento.