El hacer streamings es una acción que se ha popularizado bastante últimamente. Las plataformas que los alojan han aumentado de manera significativa sus usuarios y es por ello que hay muchas probabilidades de que estés interesado en hacer un directo con tu Mac. En este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber para hacer estos directos en Twitch, YouTube o Facebook Live.
Qué debes saber antes de comenzar a stremear
Hay que tener en cuenta que para realizar un streaming hay que realizar un proceso previo de instalación. No sirve únicamente abrir el ordenador y darle a un botón para estar ya en directo, sino que a continuación te contamos todo lo que debes tener en cuenta antes de abrirte camino a convertirte en un auténtico streamer.
Requisitos que deberás cumplir
Para hacer streaming no hace falta tener una hardware absolutamente top. Todo dependerá del programa que se vaya a usar como vía de comunicación con el propio servidor. De manera general hay que tener en cuenta que este tipo de programas necesitan codificar la información y esto se hace en la CPU y también en la GPU integrada que tengas en ese momento en tu Mac.
Ante este caso es importante destacar que deberás tener una CPU adecuada, recomendando en este caso disponer de un chip M1 para poder realizar estas tareas. Esto se debe a que en un procesador Intel se puede producir una mayor generación de calor provocando a la larga diferentes problemas. Además también se recomienda tener un Mac que disponga de una buena ventilación para poder contrarrestar todos estos problemas.
Los programas que puedes instalar
Para poder realizar la emisión de contenidos es lógico que se debe usar un programa especializado. Por desgracia en macOS la cantidad de estos programas no es muy abundante con respecto a Windows donde si hay una mayor cantidad de este software de transmisión. Igualmente, a continuación te mostramos las opciones más interesantes a día de hoy.
OBS
Este es uno de los programas más famosos que se utiliza para poder retransmitir en las principales plataformas de streaming como por ejemplo Twitch o YouTube. Ofrece todas las herramientas que son necesarias para poder capturar la pantalla y también el sonido así como integrar otras muchas funcionalidades. Pero lo más interesante de todo es que tiene código abierto y es completamente gratuito haciéndolo la mejor opción que puede llegar a existir en macOS.
Con una única clave de transmisión podrás retransmitir tu contenido indiferentemente de donde estés registrado. Como hemos comentado anteriormente el programa está preparado para realizar diferentes montajes en directo para que tengas una experiencia lo más personalizada posible. Si bien, tiene un problema «grave» con la interfaz que usa ya que puede parecer bastante antigua. En estos casos, se pueden instalar algunas skins como por ejemplo StreamLabs.
Quizás el principal problema de esta aplicación es que consume muchos recursos y que para Mac, es diferente si vienes desde un dispositivo Windows, ya que necesitas adaptarte a la forma de trabajar de la aplicación en un nuevo ecosistema. Eso sí, la experiencia es igual de buena que la existente en Windows.
- Lo mejor: es una herramienta gratuita que te permite poder grabar vídeos y directo para tu Mac.
- Lo peor: tiene una curva de aprendizaje que puede que puede resultar compleja para empezar a grabar. Además, si tienes un equipo con pocos recursos, se calienta muchísimo.
Vmix
Software de transmisión y producción en vivo pensado para multiples plataformas. Se destaca sobre todo Facebook Live, YouTube o Twitch. Cuenta con todas las herramientas necesarias para poder realizar diferentes transiciones de una manera segura y cómoda. Además la interfaz es bastante atractiva y perimte tener muchas opciones siempre en pantalla para ir editando el modo en el que estás transmitiendo los diferentes contenidos.
Igualmente también se pueden instalar diferentes skins de transmisión para que se pueda visualizar en la pantalla. Es decir, si alrededor de tu cámaras quieres que aparezca un cuadro concreto es posible hacerlo cómodamente. Incluso lo podrás diseñar tu mismo en Photoshop e incluirlo rápidamente en tu escena. Y hablando de las escenas las podrás personalizar a tu gusto e incluir todos los elementos multimedia que necesites como por ejemplo la captura de pantalla o de otro elemento como una webcam.
- Lo mejor: tiene grandes herramientas de edición de vídeo y de imágenes, incluso poder diseñar desde Photoshop.
- Lo peor: es bastante completo de utilizar si no tienes experiencia en este ámbito.
Qué debes saber de la clave de transmisión
Hay que tener en cuenta que para realizar un streaming hay que disponer de una clave de transmisión. Este es uno de los códigos más importantes para cualquier streamer ya que es el responsable de conectar el software que vas a usar con la plataforma en la que se va a visualizar el directo. Normalmente esta es una clave amplia y compleja que no debes memorizar y que siempre permanece en oculto y que no se debe compartir por nada del mundo.
Cuando se va a realizar algún directo no se pide que inicies sesión en Twitch, YouTube o cualquier plataforma que sea similar. El sistema de identificación y conexión es la clave alfa numérica que proporciona el servicio y que realizará la conexión con el servidor. Es por ello que con esta clave cualquier persona puede emitir en tu canal sin que te enteres de nada siendo realmente importante que se mantenga en secreto siempre.
Cómo conseguirla
La gran pregunta que te puedes realizar es cómo se puede conseguir esta clave. El proceso varía dependiendo de la plataforma que hayas elegido para poder hacer tu transmisión como Twitch o YouTube. De manera general esta es una clave que como hemos comentado anteriormente se encuentra oculta. En todas las plataformas se te pedirá siempre identificarte para poder acceder a ella y de manera predefinida estará oculta. Esto está pensado para que simplemente copies la clave y la pegues en el programa de transmisión sin que tu mismo la puedas terminar de ver garantizando de esta manera la privacidad. Igualmente en todo momento se dará la opción de revocar la clave de transmisión y se ofrecerá otra en el caso anulando la anterior si te la han robado o hackeado.
Dependiendo de la plataforma que uses para realizar el streaming la ubicación de la clave puede variar. De manera general se puede encontrar dentro de la configuración de la plataforma en el apartado dedicado a la transmisión. Pero como decimos, todo puede variar entre todas las plataformas que existen a día de hoy para hacer este tipo de contenidos.
Preparando todo para la emisión
Cuando ya se tienen los programas descargados hay que comenzar a preparar la correspondiente emisión para que todo salga de manera correcta. A continuación te contamos los puntos que debes tener en cuenta si usas macOS para que no tengas problemas y sepas controlar los problemas que puedan surgir.
Otorga todos los permisos
Una de las diferencias que se pueden presentar con Windows y que siempre hay que tener muy presente es la privacidad. En Windows el hecho de tener permisos no es tan importante como si ocurre en macOS donde es mucho más evidente que este es un paso obligatorio por completo. Es por ello que al iniciar el programa es importante otorgar todos los permisos requeridos para que funcione correctamente. Nos referimos a los permisos de cámara y también de micrófono. En el caso de que no se terminen otorgando no se podrá usar de manera correcta el programa de streaming en concreto.
También es importante que a la hora de grabar la pantalla se otorguen los permisos necesarios para poder aplicar todas las funcionalidades del programa. Igualmente, al instalar seguramente también se te pida aceptar algunos permisos por ser un desarrollador que no es de confianza de la propia Apple. Pero como decimos esto es lo más diferencial que se va a poder encontrar con Windows para poder iniciar directo en tu plataforma favorita. Con este tipo de aplicaciones, lo más recomendable es ir preferencias del sistema o Ajustes del sistema y permitir que pueda acceder a todo el contenido de tu Mac o iMac, y auge así podrás acceder a todas las funciones que ofrece OBS o Vmix. Recordad que los Mac son equipos muy seguros y siempre que intenta acceder a información personal, evitar todo acceso a no ser que sea el propio usuario que lo incluya.
Revisando las escenas y lo que estás capturando
Una vez que ya tienes la clave de emisión introducida en el programa de streaming, es hora de preparar todas las escenas que quieras tener en pantalla. Debes saber que dentro de una escena puedes tener elementos muy diferentes para ir cambiando a lo largo de una emisión. Esto es muy similar a lo que se tiene en una televisión donde van cambiando de grafismos a través de transiciones.
Como hemos comentado, en cada una de las escenas podrás tener diferentes elementos. Lo más común es disponer de una entrada de la imagen de tu cámara y también del sistema de sonido. Los sistemas de streaming permiten elegir siempre que tipo de micrófono que se tiene conectado al Mac se puede elegir rápidamente. Incluso tampoco estarás obligado a hacer uso de la cámara web que tengas integrada ya que también se podrá conectar otra cámara que cuente con una mayor calidad de imagen.
Igualmente si eres una persona que va a dedicarte a retransmitir algún tipo de videojuego deberás capturar la pantalla de tu Mac o la de otro monitor en la que se proyecte otra cosa. Esto es algo realmente importante y que también se integra en la propia escena. Igualmente siempre es posible dedicarte únicamente a realizar una retransmisión únicamente de tu rostro hablando a tu público que es algo que se ha popularizado últimamente.
Cuando ya tengas todos estos parámetros configurados es hora de iniciar el directo y que todo el mundo vea lo que estás mostrando en la pantalla o también a través de la propia cámara. Durante este proceso podrás siempre tener una ventana con el chat de la transmisión. De este modo te será mucho más fácil el hecho de ir interactuando con toda tu comunidad sin salir de la propia herramienta de streaming.
¿Qué problemas pueden surgir?
Hay que tener en cuenta que cuando se está intentado streamear en macOS pueden surgir algunos problemas que terminen provocando que no puedas realizar esta acción correctamente. El problema más común puede estar relacionado con el propio hardware que se está utilizando. Dependiendo del Mac que se está usando puede que a la larga termines notando un aumento de la temperatura del hardware, y también una ralentización. si tienes un equipo con unas especificaciones pequeñas, puede provocar que se produzca una ralentización no del vídeo, sino de la unión del vídeo y del audio. Además, puede también generar ruido el Mac o iMac, y durante la grabación de este el ruido será constante y a pesar de que utilices diferentes herramientas de vídeo para reducir el ruido, será imposible su eliminación y tendrás que volver a grabarlo.
Hay que tener en cuenta que cuando se está realizando un streaming, se está haciendo un uso bastante importante de la CPU y también de la GPU. Estos componentes se usan para poder procesar la imagen que se está capturando para enviarla a los servidores. Igualmente, también se debe tener en cuenta que si estás jugando mientras estás haciendo streaming es posible que no el Mac no tenga la capacidad de hacer las dos tareas de manera simultánea. Es por ello que siempre se debe tener en cuenta las limitaciones del hardware para poder realizar este tipo de tareas, al no disponer de manera general de una tarjeta gráfica dedicada.
En un segundo punto se debe destacar las limitaciones de compatibilidad que se pueden ir presentando. Mientras que en Windows estos programas se han sabido adaptar muy bien, en macOS no ha ocurrido así. Esto se debe a que un Mac no está pensado para el mundo gaming como si ocurre con un PC haciendo que no haya mucha variedad de software y se está más limitado. Además, aquellos que se pueden instalar se puede terminar provocando alguna incompatibilidad de relevancia.
Déjanos en los comentarios si alguna vez has tenido problemas a la hora de grabar vídeo y si has tenido problema de ralentización en tu Mac por altas temperaturas.