Recientemente he comprado el MacBook Pro de 16 pulgadas, sin embargo, tras unas primeras semanas de trabajo, he llegado a la conclusión que quizás no es el equipo ideal para determinados flujos de trabajo, los cuáles vamos analizar a continuación.
Potencia desmedida, pero en un portátil
Consciente de que el equipo tenía un rendimiento excepcional debido a que tenía un Mac mini con M1 y 16 GB de RAM, decidí adquirir el MacBook Pro de 16 pulgadas con el chip M1 Pro, para cuando tenía que desplazarme a otros lugares de trabajo y necesitaba un equipo que me permitiese trabajar con la misma fluidez que tenía en el sobremesa. El nuevo equipo es perfecto en ese sentido, una pantalla grande y buena calidad, buena configuración para trabajar a la mayor velocidad cuando necesitaba exportar proyectos, renderizar y modelar texturizar complejos de 3D. Recuerda que siempre es necesario tener unas gafas de luz azul cuando estamos trabajando con el equipo.
La duración de la batería, un quebradero de cabeza
Dejando claro que el rendimiento del equipo es perfecto, la batería es el punto negativo de este dispositivo. Era consciente que en tareas complejas, la batería se viese mermada, el problema ha sido cuando la batería baja considerablemente en cualquiera tarea, ya sea una tarea sencilla o una tarea compleja. De esta forma, hace casi obligatorio tener el portátil todo el día conectado a un cargador o ser dependiente de él, situación que era consciente, pero no hasta el punto de tener que llevarlo siempre conmigo, donde su peso y su tamaño se nota.
Peso y tamaño
Concluíamos el párrafo anterior hablando de su peso y tamaño, el cual, y que como hemos dicho se nota, debido a que, es un equipo que pesa de los dos kilos, donde el cargador y su peso es fijo en la mochila, por lo que hace que no sea el equipo ideal para transporte.
Es cierto que cuando empiezas a trabajar con él, te olvidas de su peso por su increíble pantalla y resolución, y sobre todo, porque tiene una ventilación perfecta. A pesar de que he puesto del equipo a tope de rendimiento (de mi rendimiento), no he conseguido hacer que el ventilador tenga que trabajar en exceso, evitando así un incremento en las temperaturas que en portátiles con chip de intel alcanzaban perfectamente temperaturas de 60-70 grados. Los ingenieros de Apple tienen que estar muy orgulloso de ello.
En un portátil, lo que buscas es portabilidad, y si buscas un gama Pro, potencia. Apple, en este nuevo MacBook Pro de 16 pulgadas tienes potencia, pero una portabilidad menor, debido a que llevar la batería siempre encima hace que sea un equipo pesado y un poco molesto de transportar, convirtiéndose en ocasiones en un dispositivo más de sobremesa para conectarlo a un monitor externo que un dispositivo concebido para transportarlo.
¿Merece la pena el MacBook Pro de 16 pulgadas?
Después de un breve análisis, todo usuario tiene que realizarse la siguiente pregunta: ¿merece la pena el MacBook Pro de 16 pulgadas? La respuesta corta podría ser que si, pero la respuesta larga es que no, debido principalmente al uso que vaya a otorgarle usuario en su día a día.
El usuario tiene que preguntarse realmente cuanto tiempo pasa en su despacho de trabajo y cuanto tiempo pasa en movilidad, porque si el porcentaje es 60% movilidad y 40% estudio, el MacBook Pro de 16 pulgadas no es tu equipo por su peso y por la duración de la batería. En este sentido, el MacBook Pro de 14 pulgadas quizás sea una opción más recomendable, eso sí, con el problema de que la batería, si estás trabajando en diseño gráfico, la pantalla es pequeña y se nota.