Las suscripciones se presentaron como un modelo más económico, frente a la opción de realizar el desembolso completo y mayor por un producto en su totalidad, cuando ni siquiera sabemos cuánto meses vamos a utilizar este producto o si verdaderamente lo vamos a poder integrar en el PC. Sin embargo, este sistema de suscripción tiene un lado oscuro, y es que la gente está empezando a pagar por cosas que no se usan o no se necesitan asiduamente. Por ello, en este post vamos a ver varios consejos para ahorrar dinero y evitar que a principios del mes se produzca un gran desembolso.
Las plataformas de streaming se presentaron como la gran solución para el pirateo y las descargas ilegales, permitiendo acceder a un amplio contenido por un precio muy pequeño. Sin embargo, poco a poco los precios empezaron a subir y los anuncios comenzaron aparecer en las plataformas para aquellos usuarios que no quieren pagar una suscripción más avanzada. Junto a ello, tenemos que añadir la prohibición de las cuentas compartidas, lo que obliga a todos los usuarios a pagar más por lo mismo que antes.
Suscripciones ocultas en las tiendas de aplicaciones
Existe una alta probabilidad de que estés pagando suscripciones por aplicaciones a las que ni recuerdas cuándo te suscribiste por primera vez. Esto puede ocurrir cuando te dan periodos de pruebas muy largos, como tres meses gratis. A muchos se nos suele olvidar cancelar la prueba gratuita y, por ende, pagamos la suscripción.
Para evitar esto, en tu iPhone dirígete a tu perfil, que se localiza en la parte superior de Ajustes, y pulsa en Suscripciones. De esta forma, podrás ver qué estás pagando dentro de la tienda de aplicaciones y servicios de Apple.
Elimina cualquier información de tu tarjeta de crédito cuando canceles una cuenta
Muchas empresas son expertas en cobrarnos un mes extra a pesar de que hayamos cancelado la cuenta. Por ello, la mejor forma de evitar pagar por algo que no queremos, aunque las empresas se empeñen en que sea así, es eliminar toda la información bancaria que tengamos en la app. De esta forma, no podrán cobrar las suscripciones porque no tienen estos datos.
Si has cumplido con los pasos necesarios por la entidad y aún así tienes miedo de que te cobren por ello, puedes indicarle al banco que no cargue a la cuenta ninguna tarifa procedente de dicha empresa.
Mantén un registro de todo y establece recordatorios
Es fundamental tener un seguimiento de todas las suscripciones. Cuando antes solo teníamos activada la cuenta de Netflix y Apple Music, era más fácil de controlar. Sin embargo, ahora que todos los usuarios tenemos 5, 6 o más suscripciones y no todas se cobran directamente a principio de mes, es más complicado de controlar.
Para ello, la mejor forma es que en nuestro iPhone tengamos un calendario para cancelar una suscripción o una prueba gratuita con 48h de antelación antes del nuevo cargo, para evitar que se te cobre.
Calcula si una suscripción todavía vale la pena
Muchas suscripciones podrían parecer una idea interesante en el momento de su lanzamiento. Sin embargo, poco a poco van perdiendo razón de ser porque no les damos el uso que merecen.
Por ejemplo, quizá no necesites una suscripción Prime para pedir productos, lo cual supone un gasto anual innecesario. La misma situación podemos tener con iCloud, que pasó de una suscripción de 0.99 a 2.99 para un uso concreto y se ha cronificado en el tiempo.
Encuentra alternativas gratuitas
Actualmente, existen en el mercado alternativas gratuitas para ahorrar dinero en suscripciones. YouTube es una plataforma que te permite ver cualquier tipo de vídeo. Por ello, si pagas un servicio como Apple Music, Tidal, o Spotify, YouTube puede ofrecerte el mismo servicio a un precio mucho más reducido e incluso gratuito.
Incluso puede dar un paso más. Spotify está disponible prácticamente en su totalidad en los Mac e iMac, por lo que puedes escuchar música sin pagar y luego, si vas por la calle, utilizar la app de YouTube.
Utiliza suscripciones gratuitas
Google Drive, iCloud, Dropbox y Microsoft tienen planes gratuitos de subida de archivos en la nube. Si no quieres pagar una suscripción por cada uno de ello, lo más recomendable es que utilices todos los servicios. Drive te ofrece hasta 15 GB de almacenamiento gratuito, y iCloud 5 GB, lo que suman un total de 20 GB, espacio más que suficiente para la mayoría de tus actividades.