Estos dos ajustes en mi iPhone me han ayudado a no preocuparme más de mi consumo de datos
Nuestro iPhone tiene una gran cantidad de opciones de configuración que no siempre conocemos. Con estos dos ajustes, vamos a poder evitar cualquier sorpresa la tarifa de datos que tengamos contratada.
Pese a que las tarifas de datos ilimitadas son, desde hace muchos años, una realidad para gran parte de usuarios, todavía son muchos los que optan por operadores que nos las tienen incluidas en su portfolio de tarifas. O que, por estar siempre cerca de una conexión WiFi, prefieren optar por opciones más económicas.
Sin embargo, en épocas como la Navidad o cuando viajamos, es habitual que necesitemos tener un poco más de cuidado para evitar consumir todos los gigas que tenemos contratados. ¿La razón? Que no estamos tanto tiempo en casa o en la oficina como es habitual. Este era mi caso pero, con estos dos ajustes que hoy te presento, he encontrado la solución para tener siempre el control.
La asistencia para WiFi
Una opción no muy conocida de nuestro iPhone, pese a que lleva ya mucho tiempo en nuestro terminal, es la asistencia para WiFi. A medida que las operadoras iban ampliando la cantidad de datos que incluían en sus tarifas, desde Cupertino se optó por ofrecer la opción al usuario de que, cuando su señal WiFi fuera débil o inestable, pueda ser sustituida directamente por la tarifa de datos de la operadora. De este modo, el iPhone va seleccionando de manera automática la conexión WiFi o nuestros datos en función de la señal encontrada en cada momento. Todo ello sin que el icono del WiFi desaparezca en ningún momento.
Muchas veces no nos damos cuenta de ello, pero si este cambio nos coge mientras estamos descargando una película o un juego, probablemente recibamos un aviso temprano de nuestra operadora informándonos del consumo de datos de nuestro bono.
Para evitar encontrarnos en esta situación, tenemos que ir al menú general de Ajustes de nuestro iPhone. Acto seguido, tenemos que pulsar sobre el apartado de Datos móviles y hacer scroll hasta el final, cuando encontraremos esta opción. Desde ese momento, si estamos conectados a una red WiFi nunca nuestro iPhone va a usar los datos si encuentra que la señal del WiFi es demasiado débil.
Reducción de datos
Si la primera opción que hemos mencionado resultaba algo desconocida para la mayoría de los usuarios, esta que os contamos a continuación, todavía más. En este caso, vamos a hacer uso del modo de datos reducidos que se encuentra disponible en nuestro iPhone.
Con ella, vamos a reducir drásticamente la cantidad de datos que consume nuestro terminal, puesto que pone en pausa todas las actualizaciones automáticas y cualquier aplicación que se encuentre en segundo plano trabajando y que haga una demanda constante de los datos. Centrándose únicamente en lo más importante, que son las aplicaciones que tenemos trabajando en primer plano.
Además, al pausar todo lo que tenemos en un segundo plano, también notamos un incremento de la eficiencia de nuestro iPhone. Cuyas transiciones van a comenzar a verse más rápidas y fluidas. Activarla es muy sencillo: Tenemos que ir al menú de Ajustes, pulsar sobre Datos móviles. A continuación, seleccionar Opciones y, en modo de datos, pulsar en Modo de datos reducidos.
Si combinamos esta opción con la anterior, vamos a comenzar a notar un descenso de la cantidad de datos totales que gastamos mes a mes, en muchos casos, sin haber disfrutado de los mismos.